El presidente de los EEUU, Barack Obama, ha centrado su discurso de investidura pública de su segundo mandato, ante cientos de miles de personas, en la defensa de la libertad e igualdad, «dos de los valores de los padres fundadores del país».

En su discurso, Obama ha mencionado temas como la diplomacia para resolver los conflictos, la inmigración, el control de armas, el matrimonio homosexual o la lucha contra el cambio climático.

El presidente ha subrayado que el «compromiso» es más efectivo en las relaciones internacionales que las «sospechas y el miedo». Por ello, ha afirmado que apoyarán la democracia «de Asia a África y de las Améticas al Oriente Medio», porque según ha señalado, «EEUU tiene la obligación de actuar en nombre de los que anhelan la libertad».

Ha añadido que su país seguirá siendo «el ancla de alianzas fuertes» en todos los rincones del mundo y que «ampliará» su capacidad para gestionar las crisis en el extranjero.

Además, ha dicho que EEUU debe ser «una fuente de esperanza para los pobres, los enfermos, los marginados y las víctimas de los prejuicios».

Según Obama, la paz de hoy en día requiere del «constante avance» de principios comunes como la «tolerancia y las oportunidades, la dignidad humana y la justicia». «Nosotros seguimos creyendo que la seguridad y la paz duraderas no requieren de una guerra perpetua, ha agregado.

También se ha centrado en el tema de la inmigración y ha señalado que su país tiene que encontrar la forma de dar la bienvenida a los inmigrantes «luchadores» que buscan oportunidades.

Obama ha mencionado la inmigración entre los temas pendientes de la presente generación, así como el matrimonio homosexual y el control de las armas. «Nuestro viaje no estará completo hasta que nuestros hermanos y hermanas gays sean tratados igual que otro por la ley», ha manifestado.

En su discurso, el presidente ha mencionado la localidad de Newtown, donde el pasado 14 de diciembre fueros asesinados 20 niños y 6 maestros en un tiroteo que ha avivado el debate sobre el control de las armas de fuego.

Otro de los temas en boca de Obama ha sido la del cambio climático, quien se ha referido como una «amenaza». Según él, no abordar este problema sería una «traición a nuestros hijos y a las generaciones futuras».

El presidente ha insistido en que algunos todavía pueden negar las pruebas de la ciencia, pero nadie puede escapar «al impacto devastador» de fuegos, sequías y tormentas cada vez más poderosas.