La iniciativa se produce en respuesta a otra recogida de firmas en sentido contrario, que superó los trescientos respaldos de vecinos del lugar y que demandaban que se desmontara esta instalación debido a los «pelotazos» y a los «ruidos».

Anteriormente el lugar era un aparcamiento con un pequeño parque. En 2014 el Ayuntamiento puso en marcha un proceso participativo y se decidió quitar el parking y el parque –al considerar que los de Gladys Enea y plaza Atotxa ya cubrían esa demanda– e instalar una cancha polideportiva, ya que no había nada similar en la parte baja de Egia.  

Parte de los vecinos que viven justo al lado han mantenido en este tiempo su postura contraria, hasta tal punto que el actual equipo de Gobierno decidió desmontar la pista. Sin embargo, se ha montado un importante revuelo en la ciudad y la reacción de los favorables al mantenimiento de de la instalación ha llevado este martes al alcalde Eneko Goia y dar marcha atrás por ahora.

«Tenemos un problema, eso está claro. Como suele suceder, hay intereses contrapuestos». Goia ha matizado que las quejas de los vecinos no son tanto por el ruido de los niños y niñas sino por las molestias que generan otros usuarios de mayor edad. Al mismo tiempo, ha reconocido que hay vecinos que reivindican la necesidad de que haya un espacio para que se pueda jugar con el balón. «Hablaremos y trataremos de conciliar los intereses de todas las partes», ha subrayado el alcalde.