Animados por artistas como Benicio Del Toro, Bad Bunny, Ricky Martin y René Pérez, miles de personas exigieron el miércoles la renuncia del gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, en una multitudinaria protesta en la capital, San Juan, que durante la noche derivó en enfrentamientos con la Policía, que llegó a lanzar gases lacrimógenos. Se trata de la quinta jornada consecutiva de protestas contra Rosselló, quien ha dicho que no abandonará el cargo.

Implicado en varios casos de corrupción, la revelación del contenido de un chat grupal de la aplicación Telegram que contenía mensajes misóginos, racistas y homófobos ha desatado una tormenta política en esta isla bajo control de EEUU.

El sábado pasado, el Centro de Periodismo Investigativo (CPI) de Puerto Rico publicó 889 páginas de chats de Telegram donde Rosselló y otros 12 hombres de su círculo íntimo calumnian a funcionarios, políticos y periodistas. Los mensajes habrían sido enviados entre finales de 2018 y el pasado 20 de enero.

Su divulgación ha provocado ya la dimisión del secretario de Estado, Luis G. Rivera, y del director ejecutivo de la Autoridad de Asesoría Financiera y Agencia Fiscal de Puerto Rico y representante del gobierno ante la Junta de Supervisión Fiscal (JSF), Christian Sobrino, que se burlaba de la orientación sexual del cantante Ricky Martin.

Días antes, en un caso de corrupción, la Fiscalía arrestó a varios funcionarios y contratistas acusados de desviar 15 millones de dólares que el gobierno federal había destinado a Puerto Rico tras el paso del huracán María en 2017, que dejó casi 3.000 muertos.

«Se mofaron de nuestros cadáveres, se mofaron de la mujer, se mofaron de la comunidad LGBT, se mofaron de toda la isla y por eso estamos aquí hoy, porque estos supuestos líderes no nos representan», denunció Martin. «Estoy frustrado, enojado, siento una presión en el pecho horrible», afirmó el conocido cantante en un video divulgado en su cuenta de Twitter antes de que comenzara la movilización.

Roselló, quien se niega a renunciar, ha alegado que «ese chat se utilizaba para liberar tensiones de días de 18 horas (…) Pero por supuesto nada de esto justifica las palabras que he escrito». «Mi responsabilidad (es) que tengamos continuidad y (que los) servicios funcionen y todos los servicios que se puedan otorgar se den», ha declarado.