«Si defender los derechos de lo trabajadores es delito, somos culpables». De esta forma ha reaccionado EH Bildu en redes sociales al tener conocimiento de que la presidenta del Parlamento, Bakartxo Tejeria, ha sancionado a su grupo por haber invitado el viernes a trabajadores del Metal de Bizkaia, que protagonizaron una protesta contra el lehendakari al acabar su punto y fueron expulsados de la tribuna de invitados en la que se encontraban.

Los grupos parlamentarios tienen la posibilidad de invitar a distintas personas, normalmente tantos como escaños tienen, para que acudan a los plenos. El viernes, EH Bildu preguntó al lehendakari por sus declaraciones del 30 de setiembre, primero de los cinco días de huelga de los trabajadores del Metal, defendiendo a la patronal y criticando a los sindicatos.

Cuando Iñigo Urkullu acabó su intervención, los trabajadores se levantaron con carteles en los que se podía leer en euskara la frase «Urkullu, ¿cuándo a favor de los trabajadores?», entre gritos de «Urkullu y Cebek son lo mismo» y el «Metal de Bizkaia en lucha». La presidenta de la Cámara ordenó su expulsión, que se realizó sin mayores incidentes. Una vez fuera, uno de sus representantes afirmó que «hemos podido ver que su posición sigue siendo la de contar la versión de la patronal, lo que significa que vuelve a dar la espalda a los trabajadores del Metal».

Tras ello, EH Bildu ha conocido hoy que la presidenta, Bakartxo Tejeria, les ha sancionado con no poder invitar a nadie durante los próximos cinco plenos.

Urkullu negó la verdad

Durante el pleno, el parlamentario de EH Bildu Iker Casanova y el de Elkarrekin Podemos Jon Hernández criticaron al lehendakari por haber dicho que la patronal del Metal había hecho «todo lo posible» para evitar la huelga, mientras criticó que los sindicatos no tenían voluntad real de negociar. Urkullu negó que se hubiera pronunciado en ese sentido y aseguró que mantuvo «una posición ecuánime en relación a esta cuestión».

Sin embargo, como desveló NAIZ, la transcripción literal de su coloquio del 30 de setiembre recoge la frase de que «estoy seguro también de que por parte de las empresas, por parte de la Federación Vizcaina de Empresas del Metal, se ha hecho todo lo posible en estos meses para intentar alcanzar acuerdos».