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La Justicia escocesa avala la legalidad del acuerdo del Brexit

El Tribunal de Sesiones de Edimburgo ha avalado hoy la legalidad del acuerdo del Brexit alcanzado entre el Gobierno británico y la Unión Europea (UE) al rechazar la demanda que pedía paralizar la votación de mañana en Westminster.

Banderas de la UE y británicas, en el exterior del Parlamento de Westminster. (Tolga AKMEN / AFP)
Banderas de la UE y británicas, en el exterior del Parlamento de Westminster. (Tolga AKMEN / AFP)

El Tribunal de Sesiones de Edimburgo, la máxima institución judicial de Escocia, ha rechazado la demanda presentada por el activista anti-Brexit Jo Maugham que pedía al tribunal que emitiese un interdicto para paralizar la votación sobre el tratado de retirada ratificado ayer por los líderes comunitarios, prevista para mañana en la Cámara de los Comunes, al considerarlo ilegal.

El pacto consensuado entre Londres y Bruselas contempla que el norte de norte de Irlanda permanezca dentro del territorio aduanero de Gran Bretaña, pero alineada con ciertas normas del mercado único, lo que, a juicio del demandante, es ilegal porque contradice la legislación vigente en materia impositiva que lo prohíbe.

La intención de Maugham era que la Justicia adoptara medidas cautelares para impedir que el nuevo acuerdo se vote mañana en el Parlamento. «He concluido que la solicitud de una medida interina es injustificada», ha considerado la corte de Edimburgo tras la audiencia que se ha celebrado hoy.

«Como dije ayer, teníamos que tomar una decisión (...) rápidamente o no hacer nada porque una vez que el Acuerdo de Retirada llegue al Parlamento es imposible impugnarlo. Era una decisión difícil (...) y el tribunal ha decidido que fue la errónea», ha dicho en Twitter, Jo Maugham, uno de los abogados que impulsó la acción legal. «Revisaremos la resolución detalladamente pero mi instinto me dice que es improbable avanzar» con este caso, ha indicado.

«Backstop»

El acuerdo cerrado ayer modifica únicamente la parte relativa al norte de Irlanda para deshacerse del llamado «backstop», el mecanismo de emergencia ideado por el anterior Gobierno de Theresa May y la UE para evitar que con el Brexit se volviera a una frontera dura entre el norte de Irlanda y la República de Irlanda.

Los líderes de los Veintisiete ya han dado el visto bueno al nuevo tratado y la Eurocámara ha declarado estar lista para ratificarlo, si bien el principal obstáculo es Westminster, que rechazó hasta tres veces el pacto anterior.

El primer ministro británico, Boris Johnson, ha reiterado que el Brexit se producirá el 31 de octubre, tal y como está previsto, con o sin acuerdo, desplazando así al Parlamento la responsabilidad de una ruptura caótica.