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Los ganaderos piden un plan que salve el sector lácteo bajo la amenaza de Noviercas

Los sindicatos UAGN y EHNE han coincidido este viernes al pedir en el Parlamento de Nafarroa medidas que salven la situación que atraviesa el sector lácteo navarro, y que se puede ver agravada por la instalación de macrogranjas de vacas lecheras como la prevista en Noviercas (Soria).

Una vaca de una pequeña explotación rural. (Jagoba MANTEROLA/FOKU)
Una vaca de una pequeña explotación rural. (Jagoba MANTEROLA/FOKU)

Con capacidad para 18.200 vacas adultas y una producción estimada de 200.000 toneladas de leche al año, solo 51.000 menos de la que tienen las 154 explotaciones lecheras que hay en Nafarroa, Noviercas supone un peligro para todo su entorno porque sus costes de escala rebajarán para el ganadero el precio de la leche, aunque el sector arrastra problemas anteriores.

La respuesta para EHNE debe pasar porque estas explotaciones «no sean posibles», algo que ya ocurre en Nafarroa desde el punto de vista ganadero, y para ello han instado también una regulación clara «porque si no al final no hay límite y el que más dinero o apoyo tiene más puede hacer». Por ello, han cuestionado la conveniencia de que las macrogranjas reciban subvenciones y apuntado que los cupos o derechos no se deberían poder vender.

«Parece que todos estamos de acuerdo pero hace valentía para poner las normas», y esa es «la labor de los políticos y lo que pedimos», han aseverado, por lo que han considerado que el reto es defender un modelo social cuando quedan pocos ganaderos y son mayores, lo que requeriría de ayudas a zonas deprimidas. Al tiempo, han alertado en el caso de los ganaderos de ovejas de la amenaza que suponen para ellos los osos que atacan sus rebaños.

Opacidad sobre los verdaderos dueños

«El fondo del problema es lo suficientemente grave como para darle importancia en el día a día», han dicho los portavoces de EHNE, que en referencia a Noviercas han calculado que podría recibir una subvención de unos 36 millones de euros de fondos públicos, ocupará miles de hectáreas de cultivos «bastante agresivos» –como la soja– y hará desaparecer decenas de explotaciones y cientos de empleos.

Pero las consecuencias no solo son para la ganadería o el medio ambiente, según han añadido. Destacan que también las hay para la agricultura, ya que estas macrogranjas necesitan mucho terreno para mantener su actividad y eso supone que la competencia que hace «es brutal y nadie sabe qué inversores hay detrás».

Precios de la leche y gestión de purines

Los representantes de UAGN han pedido planes estratégicos y un acuerdo que implique a la distribución y a la ciudadanía porque cada año se registra en Navarra un descenso en vacas de ordeño y el rendimiento económico que obtiene por su actividad el ganadero es «ínfimo», lo que provoca una falta de relevo generacional y agrava la despoblación en zonas de montaña.

«Es hora de actuar, de dejar de hacer estudios y de apostar por el sector y su continuidad», han añadido, y afirmado que los 60.000 euros que el Gobierno foral destina a la recogida de leche en la montaña son para las empresas ya que al ganadero solo le llegan «limosnas», por lo que han pedido también campañas de promoción y estrategia para el sector, y poner en valor la ganadería y la labor del ganadero.

UAGN ha denunciado además que la distribución «campa a sus anchas, con la leche y sus derivados como producto reclamo«, algo que «se debe parar» cuando se ofrece leche a 56 céntimos. El Ministerio dice que por debajo de 79-80 la cadena «no es sostenible» y pese a ello el propio Gobierno foral marca como precio máximo para la compra de leche en el Complejo Hospitalario de Navarra los 60 céntimos.

Y han agregado que desde el punto de vista de sanidad animal Noviercas «es una bomba» porque cualquier inmovilización o sacrificio que tenga que hacer la administración dejará sin recursos a otras explotaciones que puedan tener problemas, y la gestión de purines será «de muy difícil control» con 260.000 metros cúbicos, equivalentes a 1.350.000 kilos de nitrógeneo que requerirán para el estiércol 5.400 hectáreas.