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Berlín

La conferencia sobre Libia en Berlín acuerda respetar el alto el fuego y el embargo de armas

Hacer efectivo el alto el fuego y respetar el embargo de armas decretado por Naciones Unidas son los pilares del acuerdo alcanzado por los aliados internacionales del Gobierno libio respaldado por la ONU y los de las fuerzas rebeldes tras la conferencia en Berlín, en la que los protagonistas, al tanto del contenido, no se han visto las caras.

Imagen de la reunión de los líderes mundiales que han tomado parte en la conferencia. (Murat TINMUHURDAR | AFP)
Imagen de la reunión de los líderes mundiales que han tomado parte en la conferencia. (Murat TINMUHURDAR | AFP)

Alto el fuego y embargo de armas. Estos son los pilares del acuerdo al que han llegado este domingo en Berlín los aliados internacionales que apoyan al Gobierno libio respaldado por la ONU y los actores que respaldan a las fuerzas rebeldes.

El acuerdo alude a la unión de fuerzas contra el «terrorismo islamista» y recoge el compromiso de las partes de disociarse de cualquier grupo considerado por la ONU como terrorista, a combatirlos y a congelar todos sus activos. Según han informado agencias, el documento reconoce que la Compañía Nacional Petrolera Libia es la única legítima propietara del curdo en el territorio y llama a reformar la empresa y a un reparto justo de sus ingresos.

La canciller alemana ha reunido en Berlín al jefe del Gobierno de Acuerdo Nacional (GNA) de Libia, Fayed al Serraj, y al hombre fuerte del país, el mariscal Jalifa Hafter. Ambos no han participado en la conferencia, ni se han llegado a ver las caras, aunque han sido informados sobre el contenido del acuerdo.

Merkel ha mantenido conversaciones separadas con los dos grandes protagonistas del conflicto libio, el primer ministro Fayez Serraj y el mariscal Jalifa Haftar. Al mismo tiempo han conversado en privado los presidentes de Rusia y Turquía, Vladimir Putin y Recep Tayyip Erdogan, aliados respectivos de Haftar y Serraj, e iniciadores de un proceso negociador que ha acabado trasladado a la conferencia de Berlín.

«Hemos acordado que habrá un plan de solución integral», ha explicado la canciller alemana, Angela Merkel, en una rueda de prensa ofrecida al término del encuentro, recogida por los medios alemanes.

«Los documentos que hemos acordado hoy deberán ser aprobados por el Consejo de Seguridad de la ONU» y tras su aprobación formarán parte del proceso político para resolver la crisis en Libia, ha añadido.

Comisión de verificación y reunión en Ginebra

Ha detallado que la comisión de verificación estará integrada por cinco representantes por cada parte y que esta comisión se reunirá en los próximos días en Ginebra para sentar las bases de un acuerdo de alto el fuego definitivo

«Lo más importante es que los representantes libios, en particular el general (Jalifa) Haftar y (Fayez) Serraj han pactado los próximos pasos a seguir, propuestos por el secretario general de la ONU y el señor (enviado especial de la ONU para Libia, Ghassan) Salame», ha indicado en referencia a la comisión militar.

El enviado especial de la ONU a Libia, Ghassan Salameh, ha señalado que el día de hoy da un «espaldarazo para seguir adelante» y ha agregado que se trata de un plan «comprensivo» y «vinculante» que «no soluciona todos los problemas» del país, pero da un «impulso» en dirección a una solución diplomática.

El secretario general de la ONU, António Guterres, ha calificado el acuerdo alcanzado de «muy importante», porque la escalada de la violencia en los últimos días era «extremadamente peligrosa».

El documento apuesta por una tregua «duradera» y «verificable» e insta a todos los actores a cumplir de forma «unívoca» con el embargo de armas. También se les exige no contribuir a la escalada del conflicto, en aras de evitar el riesgo de conflicto regional o guerra subsidiaria.

El texto incluye además un acuerdo para la desmovilización y el desarme de las milicias y sanciones concretas en caso de incumplimiento del alto el fuego, ya que todas las partes coinciden en que no cabe una solución militar que solo incrementaría el sufrimiento de la población.