Dabid Lazkanoiturburu

Dos cadáveres políticos afilan sus cuchillos en Italia

Dabid Lazkanoiturburu (Gorka RUBIO/ARGAZKI PRESS)
Dabid Lazkanoiturburu (Gorka RUBIO/ARGAZKI PRESS)

Mientras media Italia, y medio mundo, mira de reojo los resultados de la ultraderecha en los comicios en el bastión histórico de la izquerda en Emilia Romagna, y en menor medida en Calabria, dos políticos dados por muertos afilan sus cuchillos mientras esperan un veredicto que podría, en caso de derrota de la coalición de gobierno, darles la satisfacción de cobrarse cumplida venganza ante sus rivales internos.

El exprimer ministro Mateo Renzi, flamante líder de los socialdemócratas del PD hasta que, al más puro estilo del británico David Cameron con el Brexit, convocó un referéndum para reformar la constitución que, tras el triunfo del no, supuso el fin de su carrera política, mira con lupa los resultados de su antigua formación en una región que ha sido históricamente bastión de la izquierda, desde el PCI pasando por el PD hasta el PD.

Consciente de que la actual mayoría parlamentaria entre esta última fuerza política y el MS5 depende del puñado de diputados que se sumaron a su nuevo partido, Italia Viva, Renzi podría vender caro su apoyo en caso de que la ultraderecha, y sus socios de la derecha extrema, se hagan con el poder en la región bañada por el Adriático.

Pero no es el único. El exvicepresidente y hasta la pasada semana ministro de Exteriores, Luigi di Maio, ha abandonado no solo el cargo sino su responsabilidad al frente de un movimiento, el MS5, que vive un proceso de descomposición, trufado de deserciones y de resultados electotales pírricos, que podría tener su corolario hoy mismo, cuando algunas encuestas vaticinan que no superaría el pírrico 5%.

Di Maio no olvida que fue el gran ausente en la negociación a varias bandas que, en agosto del año pasado, concluyó con un acuerdo, en Roma, Bruselas (UE) y Biarritz (G7) que rompió con el pacto de gobierno entre el MS5 y la Lega del xenófobo Matteo Salvini. Desde entonces, Di Maio ha aguantado como pollo sin cabeza pero amenaza ahora con una refundación del movimiento grillini en previsión de desastre y de un abrupto final de la corta legislatura y nuevas elecciones.

Italia vuelve a demostrar su capacidad para resucitar a cadáveres políticos, e incluso humanos, Mussolini revive en Salvini y en los neofascistas Fratelli D'Italia. Renzi y Di Maio atienden ansiosos al momento para salir de sus respectivas tumbas.