Natxo MATXIN

Osasuna firma su peor partido de la temporada con contundente derrota ante el Granada (0-3)

Los rojillos, muy incómodos durante todo el partido, han ofrecido una imagen muy pobre, especialmente en defensa, donde han cometido errores de bulto. Siguen sin encadenar su segunda victoria seguida en Liga ni puntuar cuando Sánchez Martínez –arbitró de manera correcta– les pita.

Rober Ibáñez apenas ha aportado mientras ha estado en el césped. (Jagoba MANTEROLA/FOKU)
Rober Ibáñez apenas ha aportado mientras ha estado en el césped. (Jagoba MANTEROLA/FOKU)

Muy rápido ha quedado claro que la escuadra navarra hacía aguas, especialmente por el flanco derecho de su zaga, donde tanto Machís –autor de los dos primeros goles– como las caídas de Soldado han sido indetectables para unos desconocidos Nacho Vidal y Aridane.

El delantero venezolano ha vacunado a los rojillos apenas cumplidos cuatro minutos, cuando su disparo, que ha tenido la fortuna de rozar en la bota del central majorero y despistar en parte a Sergio Herrera, se ha colado en las redes en una jugada que ha partido del error en un pase horizontal –se han empeñado los locales en utilizar tan arriesgada acción– del defensa canario.

Tampoco han estado los anfitriones especialmente atinados cuando han llegado al área rival. Iñigo Pérez lo ha intentado con un empalme que ha golpeado en un defensa y Rober Ibáñez, prácticamente inadvertido en la primera parte, se ha encontrado con un balón ideal para empatar, pero ha empalmado de manera muy defectuosa.

Quien sí que ha acertado, aunque en ajustado fuera de juego señalizado por Sánchez Martínez, ha sido un activo Enric Gallego, de los pocos jugadores locales que se han salvado. Sin embargo, de lo que pudo ser la igualada se ha pasado inmediatamente al segundo mazazo granadino. De nuevo, Machís, en un lance casi calcado al primer gol, ha materializado el 0-2, otra vez ante la parsimonia del costado diestro de la zaga navarra. Decididamente, no ha sido el día de algunos rojillos.

La pesadilla se ha prolongado antes del descanso. Osasuna, incapaz de salir con el balón jugado y buscando el pelotazo largo, ha encajado el tercero, aunque Iñigo Pérez ha vuelto a disponer de otro disparo, esta vez con la derecha, pero que no ha encontrado el marco defendido por un Rui Silva que apenas ha tenido trabajo durante la primera mitad.

El preparador del conjunto andaluz, Diego Martínez, ha colocado un doble lateral derecho elástico para formar una línea de cinco atrás, metiéndose de central Víctor Díaz, con el objetivo de taponar las subidas de Estupiñán. No solo lo ha logrado el francés, sino que incluso se ha permitido el lujo de incorporarse al ataque para firmar el 0-3, ganándole la espalda al ecuatoriano.

Encefalograma plano
Seguramente sin faltarle ganas de hacerlo, pero por no dejar a ningún jugador marcado, Jagoba Arrasate ha salido tras el descanso con el mismo once que no ha carburado en los primeros cuarenta y cinco minutos. Sin embargo, no ha variado un ápice la tónica del partido. El Granada ha ganado casi todos los duelos, Osasuna ha seguido siendo incapaz de trenzar dos pases y las ocasiones más claras han caído del lado visitante. 

Soldado ha tenido la opción de subir el cuarto al electrónico, pero ha acabado disparando al pecho de Sergio Herrera. Colmada la paciencia del preparador de Berriatua a la vista de lo que acontecía sobre el césped, ha realizado un doble cambio buscando una reacción que no ha llegado, dando entrada a Arnaiz por un insulso Rober Ibáñez y Fran Mérida en lugar de Iñigo Pérez, además de pasar a una defensa de tres centrales, incrustando a Oier en la línea zaguera.

A lo más peligroso que ha podido llegar el cuadro rojillo ha sido a un cabezazo defectuoso de Gallego, mientras que Puertas, recién entrado, ha dispuesto del cuarto en el segundo palo y al mismo futbolista se le ha anulado más tarde un tanto por posición antirreglamentaria.

Con total impotencia, Osasuna ha sido incapaz de inquietar a Rui Silva –un solo intento entre los tres palos en la segunda mitad– en un duelo que los pupilos de Arrasate deberán olvidar cuanto antes. Un tachón que duele, pero no emborrona la temporada. La grada, como siempre, con un contundente 0-3 en el luminoso, no ha parado de animar a los suyos, especialmente en los últimos minutos.

Muy crítico con el juego y la actitud de los suyos, Arrasate ha recordado en sala de prensa que ya avisó en la previa de que para competir en Primera se necesita hambre. «Si no sentimos esa necesidad, no sacamos nuestra mejor versión. Cuando crees que eres de Primera, pasa lo que ha ocurrido hoy», ha indicado contundente.

El preparador de Berriatua ha hablado incluso de «relajación» en los primeros minutos de sus jugadores de un partido «para tomar nota, olvidar no, podemos aprender mucho de este tipo de encuentros». «El público nos ha hecho saber que tenemos que levantarnos, pero me preocupa que no hemos sido contundentes en defensa y que ellos han jugado muy cómodos», ha ampliado.