La provincia china de Henan, que colinda con la de Hubei, donde se originó el brote de coronavirus que ha dejado ya más de 43.800 muertos en todo el mundo, ha tomado la drástica decisión de cerrar por completo el condado de Jia ante el temor a una segunda ola de contagios de COVID-19.

Las medidas introducidas en la zona, donde reside más de medio millón de habitantes, incluyen toques de queda, especialmente en la ciudad de Pingdingshan, donde se ha impuesto la cuarentena obligatoria. Según el diario ‘South China Morning Post’, los residentes necesitan autorización para realizar «cualquier tipo de movimiento» fuera de sus casas, ahora que China ha comenzado a registrar un descenso de los contagios tras meses de restricciones.

El Ministerio de Sanidad ha indicado a fecha de 1 de abril que se han registrado 36 nuevos casos, de los cuales todos ellos proceden del extranjero, a excepción de uno.

Asimismo, las autoridades sanitarias han certificado la muerte de otras siete personas, seis de ellas en la provincia de Hubei y una en Shanghai. El Gobierno se ha mostrado dispuesto a impulsar la economía, si bien ha expresado que las nuevas medidas de recuperación económica deben ir en la línea de las restricciones para evitar una nueva ola de casos.

En Jia, los residentes tendrán ahora que tener permisos especiales para poder abandonar sus casas y se les tomará la temperatura antes de realizar cualquier desplazamiento. EL presidente chino, Xi Jinping, ha pedido evitar «rejillas» por las que se puedan colar nuevos casos en China, que ha registrado más de 3.300 muertos y 82.000 infectados.

Por ende, todos los comercios y negocios del condado han sido cerrados a excepción de las tiendas de alimentación, farmacias, gasolineras, hoteles y hospitales. Los coches, por otra parte, solo podrán utilizarse en días alternos dependiendo de las matrículas.

Wuhan retoma su conexión ferroviaria con Europa

Por otro lado, las autoridades de China han informado que la ciudad de Wuhan, epicentro del brote de coronavirus, ha reanudado su conexión ferroviaria con Europa.

Así lo ha confirmado la empresa de transporte Alianza Ferroviaria Euroasiática, que ha señalado que el tren, el primero que sale de Wuhan desde que comenzó la pandemia, atravesará Rusia.

Tal y como ha especificado la agencia de noticias Xinhua, el tren ha salido de la estación de Wujiashan con destino Alemania, país al que trasladará, principalmente, material médico.

El valor total del cargamento transportado es de unos 22 millones de yuanes (2,8 millones de euros) e incluye a su vez partes de automóviles y productos electrónicos.