El hecho de que la semana pasada comenzase con crecimientos de contagios por debajo del 10% y en los últimos días hayan sido menores del 5% ha llevado a la presidenta del Ejecutivo foral, María Chivite, a valorar que «el escenario se estabiliza», aunque sin abandonar la «prudencia» necesaria en torno a la crisis sanitaria.

Ha ampliado su punto de vista con la circunstancia de que también los hospitales y las UCIs están «con menor presión», si bien «están siendo duros todavía» los datos que se refieren al número de fallecimientos, pero «vamos por un camino positivo», ha resaltado.

También se ha referido a un tema polémico en las últimas horas, como ha sido la retención en el aeropuerto de Ankara de 12 respiradores destinados a Nafarroa. Chivite ha asegurado que está previsto que este mismo domingo lleguen a Madrid y que estén disponibles para la próxima semana en los centros hospitalarios del herrialde.

Menor concreción ha podido ofrecer en lo que se refiere al millón de test que el Gobierno español se comprometió a enviar a las comunidades autonómicas, una remesa de la que no hay confirmación oficial en cuanto a fechas de entrega. La presidenta ha asegurado que, cuando lleguen a Nafarroa, se priorizará su uso en personal asistencial y residencias.

Chivite ha informado de que en este momento hay 90 enfermos ingresados en la UCI y que Nafarroa se ha ofrecido a unirse al grupo de trabajo que prepara «la salida por fases» de la crisis, porque «creemos que podemos hacer una aportación importante».

En un plano más económico, ha indicado que «parece que vamos a volver a la actividad laboral en las próximas semanas», una flexibilización que ha valorado de manera positiva y ha respaldado la fabricación local de materiales de protección individual.

Chivite le ha trasladado a Sánchez la petición de que se flexibilice el objetivo de déficit y los ayuntamientos puedan disponer del remanente acumulado, unos 213 millones en Nafarroa, para atender la actual situación sanitaria y todas las demandas sociales.

En este sentido, ha resaltado la colaboración con las entidades locales, porque «ahora más que nunca es necesario que se impliquen en una de las cuestiones que más nos preocupan, que es el ámbito residencial», ya que muchos de estos centros son de carácter municipal.

Chivite ha vaticinado que los datos de desempleo de abril van a ser «muy duros», al igual que los de marzo, y ha revelado que otra cuestión que le ha transmitido a Sánchez es la preocupación del sector primario por encontrar mano de obra para las campañas de verano.

La presidenta ha señalado que, una vez superada la crisis del coronavirus, será el momento de la «reconstrucción económica», abogando por trabajar con los agentes sociales y económicos, y ha confirmado que las ofertas públicas de empleo –con una dotación presupuestaria de 2,5 millones– no se van a ejecutar.

Finalmente, ha apostado por la presencia de los presidentes autonómicos en la negociación por los nuevos Pactos de la Moncloa. «España es un país descentralizado, plural y diverso», de ahí que, a su juicio, las comunidades autónomas deban tener una «parte activa» en dicha negociación.