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El diminuto y letal Covid-19 paraliza casi del todo los enormes «pájaros de hierro»

La actividad de los aeropuertos y aerolíneas se encuentra en mínimos históricos. Afecta al empleo directo, a la subcontratación y a otros servicios. El diminuto y letal virus Covid-19 ha logrado dejar en tierra a la mayoría de los «pájaros de hierro» provocando un problema presente y, sobre todo, un incierto futuro para el sector y entre quienes ya habían reservado vuelos.

El tránsito de viajeros en el aeropuerto de Loiu es mínimo estos días. (Marisol RAMÍREZ/FOKU)
El tránsito de viajeros en el aeropuerto de Loiu es mínimo estos días. (Marisol RAMÍREZ/FOKU)

El Covid-17 mantiene el aeropuerto de Loiu en unos niveles anecdóticos de actividad. Si la última semana de marzo estaba a un 17%, en estos primeros días de abril se ha reducido más. La Semana Santa ya no será un transitar de personas y maletas por Loiu y otros aeropuertos vascos. Está casi vacío. Más suerte tiene el aeropuerto gasteiztarra de Foronda con las operaciones de carga de mercancías, aunque los vuelos de viajeros se suspendieron. 

Las aerolíneas han anunciado expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) que afectan a unas 34.000 trabajadores de compañías como Air Europa, Air Nostrum, Norwegian, Vueling, Ryanair o Iberia durante tres meses.

Fuera dividendos, demanda en Loiu

En este contexto, el comite de Loiu ha denunciado a Aena, responsable de los aeropuertos en el Estado español, porque está aplicando una reducción prolongada de los servicios subcontratados.

Ponen de manifiesto que la plantilla de la limpieza se ha reducido en un 88%, «pasando de 42 a 5 personas trabajadoras». Le piden que retome las negociaciones con las empresas de subcontratación, porque «la sociedad no puede entender que Aena esté poniendo en juego cientos de empleos en Loiu y miles en el conjunto de los aeropuertos para satisfacer los intereses de los accionistas privados».

El comité pide a Aena que «se suspenda de forma definitiva el reparto de los 1.2000 millones de dividendos, de los que 600 millones irán a manos de minoría de accionistas privados, y se destinen a salvaguardar el empleo en los aeropuertos y al sostenimiento del Estado de Bienestar».

La UE retrasa el cobro de tasas

Ayer mismo se conoció que las aerolíneas españolas lograrán ahorrarse el pago de 80 millones tras decidir la UE retrasar el cobro de las tasas de ruta. Las aerolíneas españolas lograrán ahorrarse el pago de 80 millones de euros tras decidir la UE retrasar el cobro de las tasas de ruta, según informó la secretaria general de Transportes, María José Rallo, quien reconoció que se suma «a las que se están poniendo en marcha para mejorar la liquidez y la tesorería de las compañías aéreas ante el parón de actividad registrado por la crisis sanitaria y el parón de la movilidad y los viajes».

El virus letal además ha provocado que la agencia de calificación de activos Moody's haya rebajado a «negativa» desde «estable» la perspectiva de los servicios aeroportuarios de Europa para un periodo de entre 12 y 18 meses por el efecto que la pandemia de coronavirus está teniendo en el tráfico, con caídas medias del 30%.

Con los viajes globales casi paralizados, los últimos resultados del índice de pasaportes de Henley ofrecen una visión «inquietante de los estragos indiscriminados causados por la pandemia Covid-19» y el futuro que aporta a la movilidad. Según explica Christian H. Kaelin, presidente de Henley & Partners, «un ciudadano podía viajar a 58 destinos en promedio sin un visado del país anfitrión; 14 años después, este número casi se ha duplicado a 107».

Afirma que la primera clasificación de la nueva década, publicada en enero de este año, confirmó de manera concluyente, con datos de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), que, en general, «las personas eran las más móviles a nivel mundial de lo que habíamos sido en la historia de la humanidad». Pero lamenta que en «las últimas semanas han hecho evidente que la libertad de viaje depende de factores que ocasionalmente pueden estar completamente fuera de nuestro control, como las preocupaciones de salud pública y la seguridad, que tienen prioridad sobre todo lo demás ahora, incluso dentro de la UE sin fronteras». Entiende que esta es una oportunidad para reflexionar sobre «lo que esencialmente significa libertad de movimiento y ciudadanía para aquellos de nosotros que quizás los hemos dado por sentado en el pasado».

Devoluciones de vuelos cancelados

Otro aspecto importante afecta a los pasajeros que tenían ya reservados los vuelos y éstos hayan quedado suspendidos por el efecto del Covid-19. Tienen que saber que la compañía debe ofrecer la elección entre una de las tres siguientes opciones: reembolso, transporte alternativo lo antes posible o transporte alternativo en otra fecha que convenga al pasajero, según explica el Ministerio español de Transportes.

En caso de vuelos de ida y vuelta comprados en una misma reserva, si se cancela el vuelo de ida y el pasajero elige el reembolso, procede éste también en el vuelo de vuelta. Si han sido comprados en reservas diferentes, sólo le correspondería el reembolso del precio del trayecto cancelado. Las dudas se pueden preguntar directamente a la Agencia Estatal de Seguridad Aérea.