El lunes, Nakamura había ganado el primer encuentro de la final; el martes Dubov se adjudicó el segundo (todos al mejor de 4 partidas y a ritmo de 15 minutos por bando con 10 segundos de incremento por jugada); la victoria final tuvo que dilucidarse en un tercer encuentro, que a su vez se ha tenido que resolver en el desempate.

Al cabo de tres días de intensa competición, Dubov ha logrado, finalmente, vengar a su jefe, el campeón mundial, Magnus Carlsen, que había caído en semifinales al perder el Armagedón contra Nakamura.

Primer asalto

La primera partida, cuyo desenlace había marcado el destino de los dos encuentros anteriores, no ha resuelto nada esta vez.

Dubov ha abierto con una Inglesa y los cuatro caballos han saltado rápidamente de su posición.

Nakamura ha entregado un peón para activar sus piezas y el ruso se ha encontrado incómodo, de ahí que propusiera tablas por repetición.

Como tampoco el norteamericano vio nada, se firmó el empate en 25 movimientos después de solo 9 minutos.

Segunda partida más animada

Las dos siguientes, sin embargo, han vivido batallas encarnizadas.

En la variante Dragón acelerado de la Siciliana Dubov ha ganado la segunda.

Nakamura han intentado aplicar su táctica de "jugar plano" a toda velocidad, que tan buenos réditos le dio en el primer encuentro, pero no ha acertado a escoger el rumbo adecuado en la encrucijada.

Dubov se ha liberado con 25...g5 y su rival tuvo que meditar su respuesta durante cinco minutos, atisbando la tormenta que se le venía encima.

En efecto, el ruso ha ido mejorando su posición y cuando ha avanzado con su peón libre por la columna H las blancas han tenido que rendirse en la jugada 44.

Se acerca el final

Nakamura necesitaba restablecer su jerarquía de número uno mundial en partidas relámpago y su reacción ha sido inmediata.

En la apertura Inglesa de la tercera, se ha mostrado agresivo desde el principio (4...c5).

Dubov ha sacrificado su peón de dama para atascar la posición negra, pero su adversario ha devuelto el infante para liberarse.

El estadounidense ha logrado un peón libre en la columna A y ha liquidado la contienda tras coronar dama.

El encuentro estaba empatado antes de la cuarta y última partida, que ha vuelto a ofrecer un Dragón acelerado.

Nakamura, con blancas, ha preferido posiciones sólidas para amarrar, al menos, las tablas, confiando en su acreditada maestría en el ajedrez relámpago.

Consciente de los riesgos que implicaba llegar al desempate, Dubov ha presionado todavía después de liquidarse el material pesado pero ha tenido que aceptar las tablas después de 39 movimientos en una final de alfiles de distinto color y cinco peones por bando.

Armagedón definitivo

El título, los 45.000 dólares reservados al ganador del torneo y la clasificación directa para la gran final del Magnus Carlsen World Tour se iban a decidir en el Armagedon: 4 minutos para las negras y 5 para las blancas, pero éstas están obligadas a ganar.

Nakamura, por sorteo, ha elegido negras, como casi todos, pero esta vez su adversario ha sido mejor.

En apenas 12 jugadas el estadounidense ha colapsado. Su posición estaba perdida y, al no haber incremento de segundos por jugada en esta modalidad, su única esperanza era ganar por tiempo, pero el ruso ha demostrado su maestría y le ha obligado a rendirse cuando le quedaban 18 segundos en el reloj.

El Magnus Carlsen World Tour regresará el 20 de junio con el Online Chess Masters, que se prolongará hasta el 5 de julio.

Del 21 de julio al 5 de agosto se jugará el cuarto y último (Leyendas del Ajedrez), antes de la gran final, del discurrirá entre el 9 y el 20 de agosto.