OIHANE LARRETXEA
DONOSTIA

Harry MacQueen: «Hacer cine es un acto político en sí mismo»

‘Supernova’ nos aproxima a la intimidad de una pareja que enfrenta un futuro incierto por la demencia prematura de uno de ellos. El trabajo de Harry MacQueen habla del amor y, obviamente, de la vida y la muerte como parte de ella, planteando un debate sobre el derecho a morir como decida cada uno.

Los actores Colin Firth y Stanley Tucci dan vida en ‘Supernova’ a Sam y Tusker. (NAIZ)
Los actores Colin Firth y Stanley Tucci dan vida en ‘Supernova’ a Sam y Tusker. (NAIZ)

El diagnóstico de la demencia senil prematura ha perturbado por completo la vida de Sam (Colin Firth) y Tusker (Stanley Tucci), una pareja que lleva unida casi treinta años. La enfermedad les enfrenta a un futuro incierto y a un presente lleno de miedos y preguntas que tendrán que compartir y resolver. El viaje en autocaravana que emprenden por los hermosos paisajes ingleses les brinda la oportunidad de rescatar viejos recuerdos y desvelar también algunos secretos.

El encuentro y la fiesta posterior que celebran con familia y amigos no deja lugar a dudas: probablemente no habrá muchas más ocasiones parecidas, por más que uno intente esquivar la realidad, por mucho que uno intente amarrarse al amor de su vida. Porque ahí está el quid de la cuestión: ¿y si el deseo es dejar de vivir?. En cierta forma, es la cuestión que plantea la última película del director Harry MacQueen, ‘Supernova’, estrenada esta tarde dentro de la Sección Oficial.

«No quiero dejar de reconocerte». Esa es la máxima que se ha marcado Tusker, escritor de profesión y demasiado joven para semejante enfermedad. Sam, un reconocido pianista, se debatirá entre permitirlo o evitarlo.

Tal y como ha revelado el propio MacQueen tras la proyección, detrás esta historia que ha dirigido y para la que ha escrito el guion «hay mucha experiencia personal y un importante proceso de investigación. Durante muchos años aprendí sobre la demencia senil prematura, aprendí de los propios pacientes y de sus familias compartiendo mucho tiempo con todos ellos. Lo cierto es que ha sido una de las experiencias más conmovedoras que he vivido», ha revelado.

‘Supernova’ parte pues de esa experiencia e investigación previa, y el resultado es «una película madura acerca del amor». Pero de un amor que no se ha mostrado en demasiadas ocasiones, ha opinado. Se refiere a dos hombres que han rebasado los 50 y donde irrumpe la enfermedad. «La originalidad es en lo que me he centrado», ha agregado.

Una muerte libre

Los personajes están representados por dos conocidísimos actores. Ambos son íntimos amigos desde hace mucho tiempo, lo que ha propiciado la química para el rodaje. Antes de que el proyecto echara a andar, ese elemento tan importante, el de la conexión entre los intérpretes, MacQueen lo llevaba ganado. Y sí, lo cierto es que ha sido buscado que fueran dos hombres. «Claro que hay una postura política en esa decisión –ha exclamado–, pero es que hacer cine, hacer una película es un acto político per se. Esta película habla de la universalidad de la experiencia humana, habla del amor, así que el género realmente da igual, pero soy consciente [de la elección]. En cualquier caso, cuanto más normalices cosas que son normales, mejor estaremos todos. Ese es el objetivo de las artes, del cine», ha sugerido.

Amor, vida y muerte. Un triángulo universal y presente durante los 90 minutos. Y en el fondo, una reflexión sobre el derecho a elegir cómo deseamos morir, o cómo no deseamos vivir. «Es importantísimo que podamos elegir. En Reino Unido no está permitido, y creo que ha llegado el momento de abrir una conversación honesta y madura al respecto. Al fin y al cabo, es el final de la vida y, por lo tanto, es parte de ella. Esperemos que este película inspire a un debate muy necesario, más en los tiempos que corren», ha pedido. Se ha dado por satisfecho si ‘Supernova’ despierta alguna pregunta como… «¿Qué harían en el lugar de los personajes?».