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La ciudad de Nueva York demanda a la Administración Trump por llamarla «anarquista»

A la ciudad de Nueva York no le ha gustado que Donald Trump le haya llamado anarquista. Este jueves ha presentado una demanda contra el Gobierno de EEUU por designarla como «jurisdicción anarquista», obstaculizar la obtención de fondos federales y suponer un abuso de autoridad, ha informado el alcalde de la ciudad, Bill de Blasio.

El alcalde neoyorquino, Bill De Blasio. (Andrew Burton/AFP)
El alcalde neoyorquino, Bill De Blasio. (Andrew Burton/AFP)

En septiembre, el Departamento de Justicia designó a Nueva York, Seattle (Washington) y Portland (Oregón) ciudades «anarquistas» por permitir «violencia y destrucción de propiedades», según un memorando del presidente Trump tras los altercados por las protestas contra la brutalidad policial. Las tres han acudido ahora a los tribunales: la demanda se ha presentado por Nueva York conjuntamente con las ciudades de Seattle y Portland en un tribunal del estado de Washington.

De Blasio ha dicho este jueves que la demanda intenta demostrar que esta designación por parte Trump es «inconstitucional» y supone «un movimiento totalmente político que minará la vida de los neoyorquinos» al cortar el acceso a fondos necesarios.

Según el asesor del ayuntamiento de Nueva York James Johnson, la designación pone en riesgo 12.000 millones de dólares en fondos federales para la ciudad y supone una usurpación de poder por parte del Ejecutivo, cuando es el Congreso el que tiene control sobre esos fondos federales.

«El Gobierno Federal está actuando de una forma arbitraria y caprichosa. No hay bases legales ni se basa en hechos para la designación de anarquista, una denominación que utilizan para determinar quién recibe fondos federales», argumentó Johnson.

El gobernador del Estado, Andrew Cuomo, ya amenazó en septiembre con interponer una demanda similar si el presidente Trump decidía recortar fondos federales como represalia por su gestión de la crisis de las protestas raciales, que desde mayo han ocurrido en ciudades de todo el país.

El Gobierno de Trump argumentó para su designación de «anarquista» de Nueva York que se produjo un aumento de la violencia con armas en la ciudad y que el alcalde ha decidido recortar los fondos de la Policía en 1.000 millones para destinarlos a programas comunitarios.