Dabid Lazkanoiturburu

‘Charlie Hebdo’ caricaturiza a Erdogan e indigna a Ankara

Ankara ha reaccionado airada tras visionar una caricatura de Recep Tayyip Erdogan en la portada de la revista satírica ‘Charlie Hebdo’. La provocadora publicación coincide con la campaña del líder turco para capitalizar el malestar islamista y seguir con su agenda neotomana. Enfrente, un Emmanuel Macron que busca, tras la decapitación del profesor Samuel Paty, reforzar su posición interna e internacional presentándose como ariete contra el islamismo.

Imagen de la portada de la revista satírica francesa. (NAIZ)
Imagen de la portada de la revista satírica francesa. (NAIZ)

El Gobierno turco se ha mostrado indignado y ha acusado de «inmoral» a la revista satírica francesa ‘Charlie Hebdo’ por publicar en la portada de su nueva edición una caricatura del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.

«Están mostrando su propia vulgaridad y falta de moral. Un ataque a los derechos personales no es humor ni libertad de expresión», escribió anoche en un tuit Ibrahim Kalin, portavoz de la presidencia turca.

La caricatura muestra a un Erdogan cerveza en mano, con camiseta interior y calzoncillos, levantando la falda de una mujer que va cubierta con un hábito islámico, y gritando: «¡Ouuuh ! ¡El profeta!»

«¡La agenda anti-musulmana del presidente francés (Emmanuel) Macron está dando frutos! ‘Charlie Hebdo’ acaba de publicar una serie de las llamadas caricaturas llenas de imágenes despreciables de nuestro presidente», ha coincidido en otro tuit Fahrettin Altun, director de comunicación de la presidencia.

«Condenamos el esfuerzo tan repugnante de esta publicación para difundir su racismo y odio cultural», ha añadido.

Más iracundo ha sido, si cabe, el viceministro de Cultura, Serdar Çam, en su mensaje en la red: «Sois unos bastardos. Sois unos hijos de perra», ha escrito.

Inmediatamente después de que la presidencia turca anunciara acciones judiciales y diplomáticas, la Fiscalía de Ankara ha anunciado la apertura de una investigación contra los actuales responsables de la revista satírica.

Macron versus Erdogan

Las tensiones diplomáticas entre Ankara y París se han intensificado desde el atentado el pasado 16 de octubre contra el profesor francés de Historia Samuel Paty, decapitado por un joven refugiado checheno en plena calle en la localidad de Conflans Sainte Honorine (afueras de París) diez días después de que mostrara unas caricaturas del profeta en una clase que versaba sobre la libertad de expresión.

Esas caricaturas comenzaron a ser publicadas en 2006 por ‘Charlie Hebdo’. Objetivo de un atentado yihadista de venganza en enero de 2015, y en el que murió masacrado casi todo su consejo de redacción, las caricaturas han sido defendidas por Macron al considerarlas legítimas en el marco de la libertad de expresión. «No renunciaremos a ellas», desafió el inquilino de El Elíseo.

Las caricaturas han sido enarboladas en las protestas por la salvaje muerte del profesor en medio de una profunda conmoción social.

Macron no ha dudado en utilizar esa palanca para reforzar, en clave interna, su «guerra al separatismo islamista», un concepto políticamente maniqueo con el que coquetea, y rivaliza, con la islamofobia de la extrema derecha francesa, y europea.

En clave internacional, el presidente francés diluye en su enfrentamiento con Erdogan lo que no son sino intereses geoestratégicos franceses en Libia, el Mediterráneo Oriental y en Oriente Medio.

Con su llamamiento al boicot a los productos franceses y su llamamiento, de momento poco secundado, a protestar contra París, Erdogan hace lo propio y se presenta como el adalid de la defensa del islam, lo que le sirve para justificar sus esperadas pretensiones neotomanas.

Tal para cual.