Equipe Media

La intimidación y la represión marroquíes persisten en el Sahara

Nada ha cambiado en el Sahara Occidental. Continúan las detenciones arbitrarias y las intimidaciones violentas de la policía marroquí contra los activistas saharauis.

A pesar de la decisión 2152 del Consejo de Seguridad que subraya la importancia de mejorar el respeto de los derechos humanos en el Sahara Occidental, las autoridades marroquíes de ocupación prosiguen su política de agresión contra los activistas de la independencia.

En Esmara Ocupada

El 7 de mayo, de madrugada, el activista saharaui Ghali Zogham, de 30 años, fue brutalmente golpeado por la policía y las fuerzas auxiliares tras haber subido la bandera de la RASD al tejado de un inmueble del barrio de los pisos.

Según el activista saharaui Salek El Batel, miembro del comité saharaui de defensa de derechos humanos de Esmara, los policías rodearon a Zogham y le dieron patadas y le asestaron golpes con las porras y con piedras en la cabeza y la espalda cuando estaba tirado por tierra.

Zougham fue transportado al 5º Hospital militar, en Guelmin, tras las radiografías realizadas en Esmara. El boletín de admisión indica «politraumatizado».

Según la familia, Zogham fue herido en la cabeza y tiene una fractura en la pelvis y en el fémur izquierdo.

En El Aaiún ocupada

El 11 de mayo de 2014, las fuerzas de ocupación detuvieron al militante saharaui Mohamed Baber en casa de un amigo, en el barrio Douirat. Según testigos presenciales, los policías golpearon al militante saharaui a plena luz del día antes de llevarle en coche policial a la prefectura, donde fue torturado. El 13 de mayo de 2014, el juez de instrucción ordenó que le llevaran a la Cárcel Negra por los cargos de «Formación de banda criminal para cometer un crimen contra personas y dinero, entorpecer la circulación»… es decir, la misma acusación hecha a Abdaselam Loumadi y Abdel Mouttalib Sarir, dos activistas detenidos en enero y febrero tras su participación en la manifestación del 15 de enero.

El 13 de mayo de 2014, a las 20h., en el barrio El Fateh, una patrulla de la policía marroquí detuvo al militante saharaui Lehmad Mohamed porque llevaba una camiseta del equipo de fútbol de Argelia. Los policías quisieron forzar a Lehmad Mohamed a decir que era marroquí. Al negarse éste, le condujeron en furgoneta hacia Gdaim Izik, a las afueras del Aaiún, donde fue torturado.

Ese mismo día, otra patrulla secuestró al militante saharaui Salek Zraiginat ante la casa de su familia. Fue conducido a la prefectura de policía donde fue torturado e interrogado durante 5 horas sobre sus actividades independentistas, principalmente por ser miembro del Centro saharaui de información.

El 15 de mayo, a las 19h., tras la manifestación organizada por la Coordinadora de asociaciones saharauis, las fuerzas de ocupación dirigidas por el comisario Mohamed Ait Omar y por Mohamed Laalji atacaron violentamente a los manifestantes y procedieron a practicar detenciones.

Mohamed Azat, de 17 años, fue secuestrado por la policía tras el ataque. Los policías le llevaron al río Essaguia donde le torturaron y le dejaron abandonado allí mismo.