Los mercados se tomaron un dia de respiro, después de conocer que el Gobierno heleno ha pedido un préstamo para tres años a cambio de reformas. Por tanto, los acreedores tienen ya sobre la mesa la propuesta que habían solicitado. A partir de ahora se abre un tiempo de análisis y negociaciones para responder a la solicitud de Atenas, aunque no será hasta el domingo cuando se conozca la última respuesta de los prestamistas. Si dan la espalda a la propuesta griega, se pasaría a un escenario que nunca se había contemplado, pese a que se han filtrado en muchas ocasiones la existencia de esos planes de contingencia, elaborados por los estados y las propias autoridades europeas. No obstante, las preocupaciones no acaban aquí, ya que en China está a punto de estallar la burbuja bursátil, mientras que el boom inmobiliario está dando también síntomas de un posible colapso y las previsiones de crecimiento son cada vez más débiles. Este miedo a una crisis múltiple en el gigante asiático castigaba seriamente a Wall Street, donde todos los índices caían más de un 1% a la hora del cierre en el SIBE. El respiro para el Ibex se concretó en un avance del 0,81%, hasta los 10.439,30 puntos. La tregua también llegó a París (+0,75%), Fráncfort (+0,66%) y Londres (+0,91%). En el Ibex, destacó el salto de Indra (+12,88%). La firma tecnológica obtuvo el respaldo a su plan estratégico, que incluye un ahorro de 200 millones de euros y el despido de 1.850 empleados. Entre los grandes, todos en verde, despuntaron compañías como BBVA, Iberdrola y Repsol al subir más de un 1%. En París, ArcelorMittal (+3,07%) y Vivendi (+2,53%) encabezaron los avances, frente a Renault y Valeo, que recortaron en más de un 4% sus cotizaciones.