Iraia OIARZABAL
MANIFESTACIÓN EN BARCELONA

«REPÚBLICA ARA», UN MENSAJE QUE APREMIA A LOS PARTIDOS

EN MEDIO DE LA INCERTIDUMBRE Y LOS DESENCUENTROS ENTRE LA MAYORÍA INDEPENDENTISTA EN EL PARLAMENT, MILES DE PERSONAS MANDARON AYER UN MENSAJE CLARO A LAS INSTITUCIONES: MANO TENDIDA PARA CUMPLIR CON EL MANDATO DE LAS URNAS Y AVANZAR HACIA LA REPÚBLICA AL TIEMPO QUE RECLAMAN PASOS EFECTIVOS.

Miles de personas tomaron ayer por la tarde el tramo entre el paseo Colón y la Ciutadella, en Barcelona, en la manifestación convocada por la ANC en defensa de la República. La movilización fue llamada hace unas semanas a fin de visibilizar el compromiso popular y demandar a las fuerzas políticas independentistas que superen el momento de bloqueo en el que están instauradas tras la aplicación del artículo 155 y las elecciones del 21-D.

En cabeza de la manifestación, el vicepresidente de la ANC, Agustí Alcoberro, el portavoz de Òmnium, Marcel Mauri, junto a representantes de los partidos independentistas. Por la mañana, Carles Puigdemont hacía un llamamiento a salir a la calle y permanecer unidos. Precisamente esa fue la principal reivindicación entre los manifestantes, que corearon constantemente lemas en defensa de la libertad de los presos políticos. Los rostros de los diputado exiliados y de Jordi Sànchez, Jordi Cuixart, Oriol Junqueras y Joaquim Forn, los cuatro en prisión, figuraban en los carteles portados por un grupo de manifestantes que a su llegada a la Plaza Palau cantaron Els Segadors entre gritos de «Llibertat».

Una y otra vez apelaron a la necesaria unidad de la mayoría independentista para cumplir con el mandato de las urnas del 1-O y del 21-D, con la constitución de la República como fin.

Los desencuentros entre las fuerzas soberanistas en las últimas semanas y las dificultades para constituir el Govern marcaban el ambiente de la convocatoria. Entre los asistentes, muchos veían la de ayer como una movilización que ha de servir para insuflar energía al independentismo. También como un toque de atención a los partidos políticos.

Preguntando en diferentes corrillos, insistían en que seguirán defendiendo la República catalana. Advertían asimismo de que no cabe desistir en los objetivos planteados y que ello requiere volver a llevar sus reivindicaciones a las calles.

«Que se la jueguen»

En el acto celebrado en la Plaza Palau, personas de diferentes ámbitos se subieron al estrado para denunciar la intervención de Catalunya vía imposición del artículo 155 y recordaron que el 1-O miles de personas «se la jugaron» en los colegios electorales en defensa de la República. Así, citaron la labor de voluntarios, defensores de los colegios electorales, todos aquellos que custodiaron las urnas, quienes están encausados por aquella jornada... Por ello, ahora reclaman a los partidos que mantengan ese compromiso. «Que los políticos se la jueguen por nosotros», expresó Jordi Pesarrodona, concejal de ERC en Sant Joan de Vilatorrada que se puso una nariz de payaso –ayer también llevaba una puesta– ante la Guardia Civil durante el registro de la Conselleria de Economía y que está siendo investigado por el 1-O. «No esteu sols» (no estáis solos), coreaban los concentrados.

También los diputados en el exilio estuvieron presentes. La legitimidad de Carles Puigdemont como presidente fue reiterada una y otra vez por quienes gritaban que es «el nostre president». Con la investidura aún pendiente –la defensa de Jordi Sànchez anunció ayer que en vez de acudir al TEDH, recurrirá hoy ante el Supremo– fueron miles quienes reiteraron su apoyo a la república y tendieron la mano a los partidos para llevar adelante su constitución. Lo hicieron desde la firmeza y exigiendo que no se dé ni un paso atrás en ese camino.

Lazos amarillos, ahora también en la diana, y esteladas coparon el espacio ocupado por la gran movilización durante la cual Jordi Pairó (ANC) defendió que «la soberanía no se pide, se ejerce. Y si el Parlament quiere decidir soberanamente el presidente, se hace, y punto».

En clara alusión a las fuerzas políticas, llamó a «ponerse las pilas» para formar un gobierno y avisó: «somos fuertes cuando estamos juntos».

Sin marcha atrás

Agustí Alcoberro, vicepresidente de la ANC, fue el encargado de cerrar el acto con un discurso en el que remarcó el apoyo a las fuerzas independentistas en el camino hacia la República al tiempo que destacó la urgencia de no quedarse estancados. «Ha llegado el momento de dar un paso adelante. Somos la gente del 1-O, la que defendió los colegios y consiguió que dos millones de persones votasen por la República», expresó.

Tras constatar que el 21-D se reafirmó esa mayoría republicana, incidió en la necesidad de un acuerdo que permita formar gobierno para poner fin a la intervención del Estado vía 155, restablecer la legalidad y avanzar hacia la implementación de la república. «Nosotros ya no somos ciudadanos del Estado español», afirmó.

En cuanto a la investidura, principal quebradero de cabeza durante las últimas semanas, señaló que solo el Parlament de Catalunya puede elegir al president de la Generalitat. «Lo que está pasando es indignante, en España no hay separación de poderes», denunció.

Alcoberro terminó su intervención con un «Visca la República catalana» antes de cantar Els Segadors, entonado ayer en numerosas ocasiones. Entre las miles de personas reunidas a pocos metros del Parlament se veían rostros de emoción, también de seriedad. Finalizada la movilización, las esteladas y lazos amarillos se dispersaron por las calles aledañas. Por delante queda el reto de cumplir con el compromiso declarado y reclamado ayer, de nuevo, por miles de personas.