Las fuertes subidas de la semana pasada dejaban la puerta abierta a una generosa toma de beneficios que pudiera servir para compensar las pérdidas sufridas en las semanas previas. Pero eso no pasó, al menos en el Ibex, porque se mantiene el optimismo renacido del leve giro de los acontecimientos propiciado por la Reserva Federal, que parece ahora más dispuesta a contemporizar con los deseos de Trump de aflojar en el ritmo de las subidas de los tipos de interés y actuar con mayor moderación en la reducción de su balance. También respaldaron el viento favorable los rumores sobre el acercamiento de posturas entre China y Estados Unidos para frenar la guerra comercial. Este aparente deshielo deberá ser refrendado en las reuniones que comenzaron ayer en Pekín.

En este contexto, el Ibex prosiguió con la escalada del viernes al sumar un 0,44%, hasta los 8.776,30 puntos. En el resto de Europa, el tono fue más negativo, con caídas del 0,38% en París; del 0,18% en Francfort; y del 0,39% en Londres. Solamente Milán (+0,65%) pudo engancharse a los números verdes. Wall Street se movía con ganancias a la hora del cierre en Europa. El Dow Jones y el S&P 500 superaban el 0,60%, mientras que el Nasdaq Composite avanzaba más de un 1%.

En el Ibex, las alzas fueron encabezadas por Mediaset (+3,68%), Cellnex (+2,86%) y ArcelorMittal (+1,91%). El grupo audiovisual, que se hundió un 41% en 2018, se vio favorecido por los rumores sobre una opa de su matriz. En el lado de los perdedores, Indra (-1,89%) y Cie Automotive (-1,09%) destacaron. Entres los pesos pesados, subidas moderadas para Telefónica (+0,90%), Inditex (+0,79%), Iberdrola (+0,56%) y Santander (+0,56%), mientras que Repsol (con -0,82%) y BBVA (-0,35%) terminaron en negativo.