Beñat ZALDUA
BARCELONA

La Policía española detiene a dos alcaldes de la CUP y a varios activistas

En una operación sin cobertura judicial e invadiendo la competencia de los Mossos en orden público, la Policía española detuvo ayer a una quincena de personas, acusadas de desórdenes públicos por cortar las vías de tren el pasado 1 de octubre. Todos quedaron en libertad.

A la vieja usanza, agentes de la Policía española detuvieron ayer de buena mañana en su casa al alcalde de Verges, Ignasi Sabater. Un arresto al que siguió el del primer edil de Celrà, Dani Cornellà, los dos de la CUP y de las comarcas de Girona. La redada se fue alargando durante la jornada hasta llegar por la tarde a la quincena de detenidos, la mayoría activistas de varias organizaciones independentistas, por un supuesto delito de desórdenes públicos. Una falta menor sobre la que no habían sido apercibidos ni citados anteriormente, lo que llevó al abogado Benet Salellas a considerar injustificada la operación. Lo manifestó a las puertas de la comisaría de la Policía española en Girona, donde en un primer momento no le dejaron entrar «hasta que hablase castellano».

En un primer momento se especuló con que el Juzgado de Instrucción número 4 de Girona, que investiga varias movilizaciones independentistas de los últimos meses, podría haber ordenado las detención, pero el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya aclaró que no se trataba de ninguna operación dirigida por un juzgado. Poco después, “La Directa” confirmaba de que se trataba de una operación realizada de motu proprio por la Policía española, en el marco de una investigación sobre el corte de las vías de tren el 1 de octubre del año pasado.

Los cargos imputados son de desórdenes públicos, lo que llevó a Salellas a recordar que la competencia en materia de orden público recae sobre los Mossos, con quienes la Policía española no se coordinó en ningún momento. Ni durante la investigación ni durante la operación de ayer. Algo que llevó al abogado a considerar la posibilidad de emprender medidas legales contra el cuerpo policial.

Por lo demás, algunas detenciones llamaron especialmente la atención, como la de Sabater, que el pasado 1 de octubre ni siquiera estaba en Girona. Además, ayer salió de comisaría con una muñeca vendada después de que la Policía le lesionase en durante su detención. También generó particular alarma la detención del fotoperiodista Carles Palacios, que el 1 de octubre cubrió la protesta en las vías del tren –su trabajo fue publicado en varios medios– y ayer estaba cubriendo las detenciones hasta que cuatro policías de paisano lo metieron en un coche, según denunció el también fotoperiodista Jordi Borràs, presente en el momento del arresto.

Por cierto, según confirmó también “La Directa”, en la operación participaron agentes de la Brigada Provincial de Información de Barcelona, la misma de la que sigue formando parte el policía que agredió al propio Borràs en pleno centro de la capital catalana en julio.

Los detenidos fueron quedando en libertad con cargos a medida que avanzó la tarde, confirmando el escaso valor policial de una operación que la mayoría de agentes independentistas –empezando por la CUP, que vio como detenían a dos de sus alcaldes– calificaron de propagandística y criminalizadora.

4.380 euros por unos carteles

Paralelamente, un juzgado de Barcelona condenó ayer al concejal de Guanyem Badalona José Téllez a una multa de 4.380 euros por haber cogido unos carteles del 1-O requisados por la Guardia Urbana de la ciudad. Ocurrió el 25 de setiembre de 2017 y en aquel entonces Téllez era primer teniente de alcalde. Los policías habían requisado los carteles por una orden de la Fiscalía que el Ayuntamiento había recurrido.

 

Sánchez se dirige a un Europarlamento vacío y con imágenes de los presos políticos catalanes

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, acudió ayer al Parlamento Europeo a ofrecer su visión de la UE en el marco de las conferencias “El futuro de Europa”. No fue, sin embargo, su mejor experiencia en Estrasburgo, donde le dio la bienvenida un hemiciclo prácticamente vacío y adornado con fotos de los presos políticos catalanes.

El plato fuerte llegó en el turno de réplicas, inaugurado por el holandés Franz Timmermans, quien en nombre de la Comisión logró ofender sin querer, como bien recogió el periodista de “Vilaweb” Andreu Barnils. Se declaró «encantado» con la actitud de «jovenes españoles que han venido a trabajar a nuestros países». Le siguió la arremetida de una larga lista de eurodiputados, empezando por la líder de los Verdes en Europa, Ska Keller, que le afeó la postura del Estado español en el conflicto con Catalunya.B.Z.