El Ibex se desmarcó de las pérdidas de las grandes bolsas europeas para terminar por encima de los 9.100 puntos, nivel que recuperaba ayer por escaso margen. Se anotaba un 0,10%, hasta los 9.100,90 puntos. En cambio, hubo cierres negativos en Fráncfort (-0,38%), París (-0,08%) y Londres (-0,06%).

Los mercados vivieron una jornada de transición, puesto que el discurso de Donald Trump en el Congreso estadounidense no trajo ninguna novedad relevante. Insistió en la necesidad de hacer cambios estructurales en las relaciones comerciales con China, poniendo énfasis en eliminar las prácticas injustas, reducir el déficit y defender el empleo en las empresas del país. Asimismo, sin hacer referencia al cierre del Gobierno federal más largo de la historia, reafirmó su voluntad de construir el muro en la frontera con México, pese a la reiterada negativa de los demócratas a darle la dotación presupuestaria necesaria.

Mientras, en Europa sigue el goteo de datos que anticipan una desaceleración económica. Ayer, el jarro de agua fría llegaba con los pedidos industriales en Alemania, que bajaron un 1,6% en diciembre, cuando los expertos habían pronosticado una subida del 0,3%.

En el Ibex, los bancos, todos al alza, volvieron a ser el foco de atención de los inversores. Sabadell (+2,94%) tomó aire al dejar atrás una racha negativa de siete sesiones y la pérdida del 20% de su cotización. Además, Bankia sumó un 2,24% y Bankinter, un 1,45%, mientras el resto de los valores del sector subía por debajo del 0,50%. Entre los pesos pesados, leves avances para Iberdrola (+0,14%) y Telefónica (+0,07%). Inditex (-0,52%) y Repsol (-0,23%) cerraban en rojo. Ferrovial (-1,26%) y Grifols (-1,23%) encabezaron los recortes.