El Consejo Vasco de Finanzas Públicas (CVFP), reunido ayer en Lakua, acordó la creación de un fondo extraordinario para subsanar los desequilibrios existentes en el reparto de los recursos económicos entre las diputaciones forales y el Gobierno de Lakua. El fondo, que se activará si uno o varios herrialdes no alcanzan el 99% de su coeficiente horizontal con el límite actual del Fondo General de Ajuste y se aplicará, en su caso, en la liquidación del ejercicio, podría ser, según explicó el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, un «primer paso» para avanzar «con paso firme» hacia la reforma de la Ley de Aportaciones, prorrogada desde 2012.

En una rueda de prensa ofrecida al término de la reunión, Azpiazu rehusó poner un plazo a la reforma de esta norma –el pasado mes de octubre las instituciones de la CAV avanzaron que el acuerdo se cerraría antes de finalizar 2018–, ya que, a su juicio, con el nuevo fondo «podemos tener una estabilidad territorial», lo que permite «darnos un poco más de tiempo para hacer la nueva ley con mayor tranquilidad». Una opinión compartida por los diputados generales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, que pusieron en valor la creación de un mecanismo que, en palabras de Ramiro González, «resuelve las distorsiones de la ley» y «garantiza la subeficiencia financiera» de todas las instituciones.

Conviene recordar que la reunión de ayer estuvo precedida de la polémica suscitada después de que Gipuzkoa anunciase este martes su intención de presentar una propuesta «sólida y rigurosa» sobre la reforma de la citada ley. Preguntado al respecto, Markel Olano destacó que el fondo extraordinario ha sido propuesto por el Ejecutivo autonómico, «y pese a que el proceso ha sido arduo y complicado, estoy satisfecho del resultado final». Al igual que lo está Unai Rementeria, diputado general de Bizkaia, el herrialde al que beneficia la norma actual. Reconoció que el acuerdo se cerró «en el último momento», ya que la Ley de Aportaciones no figuraba en el orden del día.

«Si los temas no están absolutamente cerrados prefiero que no estén en el orden del día para no generar problemas. Y cuando hicimos el orden del día no teníamos plenas garantías», apuntó Azpiazu, que también aportó los datos de la recaudación por tributos concertados en el ejercicio 2018, que ascendió a 14.981,5 millones de euros, «lo que ha supuesto un crecimiento interanual de la recaudación del 3,5% y una ejecución sobre la última previsión realizada el pasado mes de octubre del 101,9%».

Recaudación y liquidación

El consejero precisó que la comparativa interanual «está distorsionada» por el efecto que sobre la recaudación de 2017 tuvieron los acuerdos de la Comisión Mixta del Concierto, que «regularizaron» los cupos del periodo 2008-2016 y supusieron una importante inyección económica. «Si se excluye este efecto, la recaudación de 2018 se ha incrementado en 1.107,5 millones de euros respecto a la del año anterior y ha alcanzado una tasa de incremento del 8%», añadió el consejero, que advirtió de que el importe de Cupo pagado en 2018 ha ascendido a 951 millones de euros. Y una vez conocido el cierre de la recaudación tributaria y los pagos del Cupo, se ha calculado, «de acuerdo con la normativa vigente», la liquidación de las aportaciones a las instituciones comunes correspondiente al ejercicio 2018. El importe final asciende a 9.997,4 millones de euros, 474,1 millones más que los inicialmente presupuestados. En cuanto a la liquidación del Fondo General de Ajuste, se van a destinar 39,1 millones de euros a Araba y 94,6 millones a Gipuzkoa.