Joseba VIVANCO
Athletic

Hacer posible lo imposible

Garitano se marca como objetivo adelantarse en el marcador para tener opciones ante un rival herido que siempre es favorito.

«Lo único que merece la pena es lo imposible, lo demás es un puto gris», se suelta en mitad de la película el protagonista de ‘‘El jugador’’. En cierto modo la lección de vida sintetiza el sino de un equipo como el Athletic, prehistóricos aquellos tiempos de vino y rosas, en una búsqueda permanente de ese imposible, ese título al que no compareció en Bucarest o aquellos en que embistió molinos de viento frente al Barça en las finales coperas. Y luego están sus otros imposibles, esos que como al jugador empedernido siempre le dan la revancha, esos que a los aficionados y al propio equipo les rescate por un día del «puto gris» que decía Mark Wahlberg. Como ganar en Liga al Madrid, o al Barcelona... o al Atlético. Catorce derrotas en diecisiete enfrentamientos entre ambos desde que Diego Simeone se sienta en el banquillo colchonero es jugar al filo de lo imposible. No es como ir al dentista, que diría Joaquín Caparrós –nuevo técnico del Sevilla tras la destitución ayer de Pablo Machín– cuando rendía visita al Camp Nou, pero para el Athletic, medirse al Atlético, su costilla de Adán, es como aquello de que el fútbol es un deporte donde juegan once contra once y en el que siempre ganan los... colchoneros.

Para el Athletic ese imposible es hoy. Sobre todo porque llega un rival herido, tocado, cansado, cuyo principal y casi único objetivo esta campaña, como era jugar la Champions en su estadio, se le acaba de ir por el retrete. Y quizá por eso es ahora o nunca. El Athletic debe, está obligado a jugar sus bazas, delante de los suyos, en un San Mamés que no necesitará de alicientes. Frente a un contrario que pasa por ser el equipo de la Liga más efectivo en el área enemiga teniendo en cuenta remates y goles, y el más efectivo en la suya propia, teniendo en cuenta disparos en contra y balones detenidos. En condiciones normales, el Athletic debería recurrir a la épica, al partido perfecto, al imposible, a la alineación de los planetas, para evitar jugar como muchas veces mejor que los colchoneros pero acabar perdiendo como casi siempre. Pero hoy, se mide a un rival anímicamente tocado al que no se pude dejar ir vivo.

El ‘Cholo’ ha tenido que recurrir, además, a nada menos que cuatro canteranos para completar la convocatoria, aunque recupera a un Diego Costa que seguro hará las delicias del público de San Mamés. Y aun así y todo, nadie en su sano juicio cree que el choque de esta tarde será pan comido. Al revés, el Atlético hace mucho tiempo que dejó de ser el ‘Pupas’. Y Garitano hace tanto o más que dejó de creer en los cuentos de hadas. «Vienen de una derrota y eso les hace más fuertes», avisa el de Derio.

Sin su defensa habitual ante las ausencias de Iñigo Martínez y Capa, Garitano incluye a Lekue en la lista –sin debutar este curso– ante una cita a la que otorga «máxima importancia» y con la máxima de «ponerse por delante en el marcador, tenemos que lograrlo y ese debe ser el objetivo». Lo contrario sería como firmar el enésimo choque en blanco ante el Atlético. Hoy, puede ser el día de Raúl García en punta y Williams en banda, con Munian por dentro. Veremos. «En cada partido introducimos un pequeño cambio», adelantó. Todo será poco para hacer posible lo imposible. Y ganar al Atlético. Todo lo demás será, simplemente, eso, un «puto gris».

Luis Enrique llama a Muniain e Iñigo

Para un futbolista del Athletic jugar una Eurocopa, con permiso de un Mundial, es un caramelo muy apetitoso; si a eso le ponemos la guinda de hacerlo en San Mamés, se convierte en una oportunidad de esas que solo pasan una vez en la vida. Será el año que viene y, clasificación mediante, la selección de Luis Enrique disputará dos partidos en el feudo bilbaino. ¿Con algún rojiblanco en sus filas? Pues el que más boletos tenía y tiene es Iñigo Martínez, que cuenta con la confianza del asturiano, y al que ayer se sumó un Iker Muniain que vuelve al combinado español 7 años después de la que fue su única participación. Sorpresa en la convocatoria dada ayer para medirse a Noruega y Malta, y seguro que sabor amargo para un Iñaki Williams que también aspira a estar en esa Euro 2020 y busca su oportunidad. El tercer internacional rojiblanco es Cristian Ganea, con Rumanía, en tanto Unai Simón ha sido llamado por la sub-21.J.V.