GARA
BOGOTÁ

Rodrigo Londoño (FARC) se distancia de Iván Márquez, a quien critica duramente

En una contundente carta dirigida a la militancia de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC), su presidente, Rodrigo Londoño «Timo», marca distancias de quien fuera el jefe negociador de la guerrilla en La Habana, Iván Márquez.

En una reciente misiva a los guerrilleros en proceso de reincorporación, Márquez afirmó en nombre de varios excomandantes del Estado Mayor Central de las FARC-EP y de otros ex mandos medios que la entrega de armas fue un «grave error».

En respuesta, «Timo» recuerda que «por unanimidad, los delegados de todas las estructuras farianas de la Décima Conferencia aprobamos los Acuerdos de La Habana. Que un pequeño grupo de antiguos mandos afirme ahora que fue una equivocación cumplir nuestra palabra, solo significa que ellos, individualmente, se apartan de las grandes decisiones adoptadas por el colectivo». Insta a Márquez a hacer autocrítica de su decisión de pasar a la clandestinidad, abandonando su escaño en el Congreso. «Desafortunadamente, no percibió la dimensión del puesto que nuestra larga lucha lo llevó a ocupar. Se fue sin ningún tipo de explicación y se negó a ocupar su curul en el Senado en el momento que más requería su presencia», remarca quien fuera el máximo jefe de la guerrilla. «Suscrita y cumplida la dejación de armas, no se trataba de lamentar con nostalgia los días de la guerra (...) Todo tiene su momento y su contexto. La guerra tenía que terminar», señala.

Resalta que «actitudes y comportamientos como los adoptados por Márquez y quienes lo siguen, apuntan a pisotear eso que para los revolucionarios es algo sagrado. La autoridad moral del partido. Debo reconocer la necesidad de marcar distancias con ellos. Somos un partido para la paz, nunca seremos un partido para la guerra».