GARA
IRUÑEA

Alrededor de 400 estudiantes recorren la ruta de la Fuga de Ezkaba

Casi 400 estudiantes de siete centros diferentes recorren ayer y hoy dos tramos de la GR-225, la ruta de montaña que sigue los pasos de los presos fugados del fuerte de Ezkaba el 22 de mayo de 1938.

En la primera jornada de la segunda edición de ‘‘Las botellas de la Libertad’’ participaron los institutos de Altsasu, Ochoa de Olza de Iruñea y Zizur. El alumnado recorrió la primera etapa de la GR-225, desde el fuerte de Ezkaba hasta la fosa de Olabe.

La actividad, dentro del programa ‘‘Escuelas con memoria’’ que organiza el Instituto Navarro de la Memoria, contó con la presencia de familiares de presos fugados, miembros de asociaciones y guarderío forestal, quienes aportaron sus testimonios a lo largo del camino.

La jornada comenzó en el fuerte de Ezkaba, donde el alumnado pudo conocer los testimonios de los familiares de José Garmendia Iriondo y Segundo Hernández Blanco, dos de los presos fugados del penal. En las botellas de la libertad introdujeron los testimonios, así como fotografías y escritos de los propios presos realizados en las paredes de las celdas.

Testimonio de una vecina

En el acto participó también Koldo Pla, quien realizó una contextualización histórica del fuerte y de la fuga. En el recorrido, el alumnado conoció de primera mano el relato de la fuga, gracias al testimonio de una vecina de Orrio, quien presenció la fuga con tan solo cinco años.

Al llegar a Olabe, visitaron la fosa en la que en 2016 fueron exhumados los restos de 16 víctimas del golpe militar de 1936. En el lugar se efectuó un homenaje en el que participó también la consejera de Relaciones Ciudadanas e Institucionales en funciones, Ana Ollo, quien quiso agradecer a todas las personas presentes su implicación en el proyecto; en especial, al alumnado. «Gracias por hacer posible que la memoria sea una cuestión de futuro. Gracias a vuestro trabajo, conseguiremos que hechos como estos no se olviden, pero sobre todo, que jamás se vuelvan a repetir», afirmó.