«Vamos a imponer más sanciones a Irán. En algunos casos vamos lentos, pero en otros nos estamos moviendo rápidamente», anunció el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que admitió el objetivo de hacer colapsar la economía iraní.

«Ahora mismo Irán es un desastre económico. Están pasando un infierno. Las sanciones les han afectado mucho. Vamos a imponer más sanciones, muchas más».

Trump lanzó esta amenaza antes de partir hacia Camp David para estudiar las distintas opciones con respecto a Teherán entre las que subrayó que la militar «sigue estando sobre la mesa», después de haber acusado a Teherán de ataques a petroleros y de afirmar que frenó un bombardeo contra el país persa en el último momento.

Unas horas después, confirmó en Twitter que las sanciones entrarían en vigor mañana.

En su habitual táctica, combinó las duras amenazas con la propuesta de diálogo pese a que Washington rompió el acuerdo alcanzado en 2015, y propuso y «empezar de nuevo». «Todo lo que quiero es que no tengan armas nucleares (...). Podríamos conseguir un acuerdo con ellos muy rápidamente si quisieran. Depende de ellos», añadió.

Trump confirmó además las informaciones sobre la decisión de Irán de no disparar sobre un avión de vigilancia que acompañaba al dron derribado en el estrecho de Ormuz el pasado jueves. «Ayer había un avión con 38 personas. ¿Lo vieron? Creo que fue una gran noticia. Lo tenían a la vista y no lo derribaron. Creo que ha sido muy sabio no hacerlo y valoramos que no lo hicieran. Creo que fue una decisión muy sabia», señaló. Un general de la Guardia Revolucionaria iraní indicó que se detectó un avión espía estadounidense junto al dron que derribó, pero Teherán optó por no atacar. En respuesta, Trump sostiene que paró un ataque de represalia diez minutos antes de que se produjera alegando falta de proporcionalidad, ya que le informaron de que habría 150 muertos, aunque según el “New York Times” fue la opinión del presentador de la cadena Fox Tucker Carlson la que frenó al presidente, al advertirle de que desencadenar una guerra acabaría con sus posibilidades de ser reelegido. Por otro lado, Irán convocó al embajador suizo –representante de los intereses de EEUU en Irán– y presentó una protesta formal por la incursión. También convocó el encargado de negocios emiratí, porque el dron partió «desde una instalación militar estadounidense en Emiratos».

Teherán publica la ruta seguida por el dron de EEUU derribado

El Gobierno iraní publicó ayer la ruta seguida por el avión no tripulado de Estados Unidos que la República islámica derribó el jueves para demostrar que el aparato se encontraba dentro de su espacio aéreo cuando fue interceptado. El ministro de Exteriores iraní, Mohamad Yavad Zarif, divulgó en su cuenta de Twitter el trazado por satélite de la ruta seguida por el aparato, y el que se aprecia que el avión espía RQ-4 Global Hawk estuvo dentro del espacio aéreo iraní durante gran parte del trayecto. Zarif, incluso, muestra los puntos en los que el Ejército iraní intentó ponerse en contacto con el aparato y sus operadores para desactivar la situación. Finalmente, el mapa exhibe con un marcador de color rojo el lugar exacto donde el dron fue derribado: a 15 kilómetros de la costa sur de Kouh e Mobarak, en la provincia de Hormozgán, y claramente dentro de sus aguas territoriales. EEUU sostiene que se encontraba en aguas internacionales. En respuesta al eventual ataque a Irán que el presidente de EEUU, Donald Trump, dijo haber frenado en el último momento, el Ministerio iraní de Exteriores, Abas Musaví, señaló que «independientemente de la decisión que ellos tomen, no permitiremos que se violen las fronteras de la República Islámica y estamos preparados para enfrentar cualquier amenaza contra la integridad de la República Islámica de Irán». GARA