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Los paros parciales en el aeropuerto de Loiu provocaron algunos retrasos

En el inicio del puente festivo, en Hego Euskal Herria coincidieron sendas convocatorias de paros parciales en el personal de tierra de Iberia y en Renfe. En esta ocasión, los viajeros apenas se vieron afectados.

Los paros parciales convocados en Iberia que afectaron al servicio de tierra del aeropuerto de Loiu no provocaron cancelaciones a primera hora y solo se registraron pequeños retrasos en algunos vuelos.

Estaba previsto que el paro se realizara por tramos horarios: de seis de la mañana, cuando se abre el aeropuerto, a nueve; de doce del mediodía a dos de la tarde; de seis a ocho; y de diez a doce de la noche, cuando cierra.

Los servicios mínimos establecidos fueron del 100% en los vuelos a Canarias e Illes Balears.

Las trabajadoras y trabajadores de tierra de Iberia, unos 270 en Loiu, atienden no solo a esa compañía aérea, sino también a otras del grupo IAG, como Vueling –la que más pasajeros mueve en Bizkaia– o British Airways, y a algunas más como Lufthansa. Este personal se ocupa desde la facturación en los mostradores hasta la carga de las maletas.

Los sindicatos demandan más estabilidad, ya que el 50% de la plantilla es eventual; racionalizar los turnos para no cambiar tanto de mañana y tarde; y que los contratos de eventuales sean como mínimo de dos horas de jornada laboral, ya que ahora se les hacen contratos de una hora.

Consideran que las condiciones laborales han empeorado en un aeropuerto que en los últimos tiempos está registrando un notable incremento del número de pasajeros y, con ello, de la carga de trabajo.

En Renfe, poco impacto

Por otro lado, la huelga convocada en Renfe ayer, día de mayor tránsito de viajeros del verano por el puente festivo, no provocó alteraciones en la mayoría de las estaciones del Estado y tuvo un seguimiento escaso en el primer turno de paros (de 12.00 a 16.00), según señaló Efe.

Los trabajadores reclaman, entre otras cuestiones, un aumento de las tasas de reposición en la plantilla de la operadora.

El portavoz de CGT, José López, indicó que la razón de tanta normalidad residía en los servicios mínimos «salvajes» decretados por Fomento. Afirmó que «todos» los maquinistas, interventores y supervisores se vieron obligados a cumplir sus funciones, y el 92,85% del resto de personal (atención al cliente, megafonía o taquillas).