GARA
BERLÍN

Berlín eliminará el impuesto creado para financiar la reunificación

El consejo de ministros alemán aprobó la eliminación para la gran mayoría de los contribuyentes del Impuesto de Solidaridad que pagaban desde 1991 los ciudadanos del Oeste para sufragar la reunificación. A punto de cumplirse 30 años de la caída del Muro, el ministro Olaf Scholz (SPD) dijo que está más cerca «la culminación de la reunificación».

El Gobierno Federal de Alemania aprobó ayer el proyecto de ley para suprimir, a partir de 2021, para la gran mayoría de los contribuyentes el Impuesto de Solidaridad, conocido popularmente como “Soli”, creado en 1991 para ayudar a sufragar los costes de la reunificación del país y, en consecuencia, la integración de las ciudadanas y ciudadanos de la antigua República Democrática Alemana (RDA).

Según explicó el Ministerio de Finanzas, a partir de 2021 dejarán de pagar esta tasa –que supone el 5,5% del Impuesto sobre la Renta y del Impuesto de Sociedades– el 90% de los contribuyentes, mientras que un 6,5% verá reducido el gravamen parcialmente y el restante 3,5% con mayores ingresos seguirá abonando el impuesto completo.

La Hacienda alemana ingresó el año pasado 18.900 millones de euros a través del Solidaritätszuschlag y el Gobierno calcula que en este ejercicio la recaudación será de unos 19.400 millones y de alrededor de 20.000 millones en 2020.

En este sentido, el Ministerio de Finanzas destacó que, en contrapartida, la abolición del recargo para la gran mayoría de ciudadanos supondrá un estímulo fiscal de unos 10.000 millones de euros en 2021 y de hasta 12.000 millones para 2024.

Según se establece en la reforma, los trabajadores con ingresos inferiores a 73.874 euros anuales dejarán de abonar el impuesto a partir de 2021, mientras que los asalariados con ingresos de hasta 109.451 euros al año solo pagarán una parte y aquellos con ingresos superiores a esta cifra seguirán pagando la totalidad.

En el caso de familias con dos hijos y con un solo progenitor trabajando, el límite por debajo del cual no se abonará el impuesto se situará en 151.990 euros, mientras que hasta 221.375 euros se abonará parcialmente y solo se pagará al completo por encima de esta cifra.

Dudas constitucionales

«Hoy es un día significativo en el camino hacia la culminación de la reunificación alemana», declaró el vicecanciller y ministro de Finanzas, el socialdemócrata Olaf Scholz, para quien los costes de la reunificación se han amortizado ampliamente, por lo que, a partir de 2021, «los pocos costes restantes serán asumidos por aquellos que tienen más que otros».

«Es justo y aguantará el examen constitucional», subrayó Scholz, gran impulsor de esta medida, en respuesta a las dudas sobre la legalidad de esta decisión que han surgido tanto dentro como fuera del Gobierno de la Gran Coalición que integra su partido, el SPD, junto a “La Unión” conservadora que lidera la canciller alemana, Angela Merkel, (CDU/CSU).

Introducido en 1991 con carácter temporal para ayudar a costear la reconstrucción del Este tras la reunificación del país, en 1995 se convirtió en un tributo permanente y en 1998 fue rebajado desde el 7,5% al 5,5% del Impuesto de la Renta.

El factor de la deuda para contrarrestar una posible recesión

El ministro de Finanzas, Olaf Scholz, comentó el pasado domingo la situación que atraviesa la economía alemana después de que los últimos datos apunten hacia una ligera recesión tras un largo periodo de ralentización del crecimiento. El dirigente del SPD señaló ante la prensa que el Gobierno de Berlín podría llegar a recurrir a un plan de estímulo semejante al desplegado durante la crisis de 2008/09, cuando inyectó 50.000 millones de euros a la economía para dejar atrás la que se ha denominado Gran Recesión.

En este contexto, Scholz defendió la importancia de que los gobiernos se ajusten a sus presupuestos en vez de financiarse con deuda, aunque destacó que Alemania, con una ratio de deuda prevista del 58% del PIB para este año, frente al 61% de 2018, se halla por debajo del límite del 60% fijado por la Unión Europea, lo que deja cierto margen de maniobra al Ejecutivo de Angela Merkel. «Si tenemos un nivel de deuda en relación al PIB por debajo del 60%, ésta es la solidez que tenemos para contrarrestar una crisis con toda la fuerza», afirmó el ministro, añadiendo que la última crisis tuvo un coste de 50.000 millones para las arcas públicas alemanas.

«Tenemos que poder reunir esa cantidad, y podemos reunirla. El mayor problema es la incertidumbre, incluida la causada por la guerra comercial entre China y Estados Unidos», añadió el dirigente socialdemócrata. GARA