La Orquesta Sinfónica de Euskadi está teniendo una presencia destacada en esta 80ª edición de la Quincena Musical. Estuvo en el foso de las dos representaciones de “Madama Butterfly” y, en formato reducido, estrenó en Getaria una nueva composición de Ángel Illarramendi dedicada a Juan Sebastián Elkano. Regresa ahora al Auditorio Kursaal para protagonizar uno de los conciertos del ciclo sinfónico del festival donostiarra. 

En esta cita, que comenzará a las 20.00, la orquesta vasca estará acompañada por la Coral Andra Mari de Errenteria, con la que unirá fuerzas para interpretar la “Suite Vasca” de Pablo Sorozabal. La OSE contará también con la colaboración de dos solistas de gran prestigio, la mezzosoprano Rinat Shaham y el bajo Mikhail Petrenko, para la ópera “El castillo de Barbazul”.

La velada estará dedicada a la memoria de José Luis Ansorena, figura fundamental de la historia reciente de la música en Euskal Herria, que falleció el pasado 1 de mayo. Musicólogo y compositor, Ansorena fundó a lo largo de su vida diversas instituciones y agrupaciones corales, entre ellas la Coral Andra Mari de Errenteria en 1966. Con el objetivo de difundir la música creada por compositores vascos, en 1973 impulsó el festival Musikaste de Errenteria y al año siguiente fundó Eresbil, el archivo vasco de la música, dedicado a recopilar y conservar el patrimonio musical vasco.

Folclore vasco y húngaro

En la primera parte del concierto, además de una virtuosa orquestación de “Gaspard de la nuit” de Ravel, se podrá escuchar la “Suite vasca” de Sorozabal, escrita durante su etapa en Alemania, donde se había trasladado en 1920 para finalizar sus estudios. En aquel período, el compositor donostiarra escribió un puñado de piezas muy influenciadas por el nacionalismo vasco, y en el caso de la “Suite vasca” (1923) acudió a poesías de Emeterio Arrese como base de un tríptico característico en el que el coro da voz a escenas del imaginario popular vasco, con un ropaje orquestal brillante y elaborado.

La segunda parte estará dedicada a la única ópera que escribió Béla Bartók, “El castillo de Barbazul”, que se interpretará en versión sin escena. Narra la historia de Judith, que sigue a su nuevo esposo Barbazul hasta su palacio para descubrir allí los secretos de su terrible pasado.