Arnaitz GORRITI
KIROLBET BASKONIA

El Fuenlabrada le saca los colores a un conjunto gasteiztarra perdido

La escuadra madrileña ganó tres de los cuatro cuartos y obtuvo su segunda victoria en Gasteiz; la primera fue en el curso 1998/99.

KIROLBET BASKONIA 80

MONTAKIT FUENLA. 92


La única vez que Fuenlabrada ganó en Gasteiz fue en la temporada 1998/99 y Velimir Perasovic jugaba en la escuadra madrileña. Ayer, con Perasovic más que cuestionado después de la debacle frente a Maccabi, vino el «Fuenla» de «Jota» Cuspinera y le sacó las vergüenzas a la escuadra gasteiztarra. Sumó la segunda victoria de su historia en Zurbano y provocó unos merecidísimos silbidos para un Kirolbet Baskonia perdido.

Perdido, por no decir muerto. al cierre de la edición Velimir Perasovic seguía siendo el entrenador de la entidad baskonista, pero se encontraba más cerca que nunca de engrosar las filas de los entrenadores caídos en los «idus de noviembre». La victoria del Fuuenlabrada, ganando todos los cuartos salvo el último, anotando no menos de 20 tantos en cada asalto, fue un golpe aún más inesperado que lo que sucedió ante el Maccabi. Con Velimir Perasovic al frente, Kirolbet Baskonia ha mostrado un nivel tremendo, pero por los motivos que sea, ha tocado fondo. Cambiar de entrenador no garantiza ningún éxito, pero viendo la barrena en la que ha entrado el cuadro gasteiztarra, ¿qué alternativas hay?

Sin norte

Se esperaba una reacción de carácter, como reza el lema sobre el Baskonia desde hace más de 10 años. Pero sacar el carácter no significa fruncir el ceño, gritar y hacer aspavientos, sino arremangarse y jugar con todo desde el primer momento. Y ese carácter solo salió en el último cuarto, con el partido prácticamente perdido.

En ese último período, Tornike Shengelia y Pierria Henry, con la ayuda de Garino, Vildoza y Polonara, Kirolbet Baskonia fue remontando, cargando de personales al Fuenlabrada, y llegó a ponerse 76-78 y con posesión. Después de 30 calamitosos minutos, parecía que iba a tener un final feliz.

Pero no, porque la defensa sobre Alex Urtasun decayó y el escolta iruindarra la clavó de tres. Y cuando Garino machacó en el siguiente ataque, Anderson tomó el toro por los cuernos y finiquitó al Baskonia con tres tiros libres sin fallo. ¿Dónde está la salida a este laberinto?