El Ibex encajó ayer su segunda caída consecutiva, perdiendo la posibilidad de superar los 7.300 puntos, nivel contra el que se estrelló el jueves. Pese a este descenso, acumula una subida semanal del 2,93%. El lunes saldrá desde los 7.154,30, tras ceder un 1,33%.

Los inversores han reforzado su vigilancia sobre las informaciones relacionadas con la pandemia. En el lado positivo, se mantiene la esperanza de encontrar, más pronto de lo habitual, una vacuna que pueda erradicar el virus. A la contra se está moviendo el fuerte aumento de contagios en todo el mundo, lo que hace temer el regreso a un escenario crítico parecido al del mes de marzo. De momento, se han retomado en Europa las restricciones en la movilidad y la actividad de sectores más expuestos a la transmisión del virus.

En el plano macroeconómico, se percibió un pinchazo en la evolución de la economía china, que sufría en julio una inesperada caída en las ventas minoristas y un parón en la producción industrial. También se constató el golpe de la pandemia con el desplome del 12,1% en el PIB de la eurozona del segundo trimestre.

En las bolsas europeas, los índices de París (-1,58%) y Londres (-1,55%) sufrieron las mayores bajadas. Algo menos se perdía en Milán (-1,13%) y Fráncfort (con -0,71%). En Nueva York, el Dow Jones y el S&P 500 luchaban por asentarse en la zona de ganancias a la hora del cierre en Europa, mientras que el Nasdaq 100 cotizaba a la baja.

En el Ibex, otro castigo al sector turístico, con notables descuentos para IAG (-4,52%), Amadeus (-3,42%) y Meliá (-3,02%). Entre los grandes, destacaron los recortes de Inditex (-1,74%), BBVA (-1,29%) y Santander (-1,05%). Solo Bankinter (+0,02%) esquivó la caída.