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La HAYA

Ban Ki-moon advierte de que «no hay vacuna contra el cambio climático»

Ban Ki-moon recordó ayer que «no hay una vacuna para arreglar nuestro clima cambiante» e instó a anteponer políticas de «adaptación» y «mitigación» ante un fenómeno que está «ocurriendo ahora y de forma mucho más rápida».

El ex secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, advirtió ayer que «no hay una vacuna para arreglar nuestro clima cambiante» y, en un acto previo a la Cumbre de Adaptación al Clima (CAS), que organiza Países Bajos el 25 de enero, urgió a los Estados a anteponer políticas de «adaptación» y «mitigación» contra el calentamiento global.

«Esta cumbre [virtual] representa una oportunidad para reflexionar sobre cómo comunidades y países alrededor del mundo pueden recuperarse de esta crisis mejor, más fuertes y de forma conjunta. En este contexto, es increíblemente importante», añadió Ban, quien dijo sentirse orgulloso de haber sido uno de los líderes mundiales artífices del acuerdo climático firmado en 2015 de París y estar «encantado» de que el nuevo presidente EEUU, Joe Biden, se haya vuelto a unir al pacto.

«En los últimos cinco años, ese acuerdo ha remodelado el panorama de cómo abordamos la crisis climática global catalizando acciones sin precedentes por parte de gobiernos, empresas, inversores, ciudades y ciudadanos. Pero tenemos que hacer más: 2020 fue un año de olas de calor, sequías intensas e incendios forestales», recordó.

Estimó que los próximos siglos estarán «definidos por cuán verde es la recuperación» y alertó de que está «profundamente preocupado de que, en la revisión de los planes de estímulo nacionales, se encontró que las medidas que aumentarán las emisiones de carbono superan en número a las iniciativas verdes».

Ban sostuvo que la pandemia puede ser vista como una oportunidad para aplicar la agenda de adaptación, algo que «nunca había sido tan importante porque el cambio climático está teniendo lugar ahora y está pasando mucho más rápido de lo que podemos sentir o creer».

E instó a invertir más en la adaptación porque «construir resiliencia al impacto climático no es algo bonito que hay que tener como país, es un deber para vivir en un mundo sostenible».

Confió en que durante la CAS los líderes mundiales vuelvan a «estar unidos en el multilateralismo e intenten abordar unos retos» que «necesitan soluciones globales basadas en asociaciones globales». «No hay ni un solo país en este mundo, por muy poderoso o rico que sea, que pueda hacerlo solo», alertó.

Para Ban, es el momento de «acelerar el proceso de implementación» del Acuerdo de París y de «movilizar el apoyo financiero, en especial para los países en desarrollo sin grandes recursos ni capacidad» porque, dijo, «es moralmente erróneo que esos países, que son los que menos han contribuido al cambio climático, tengan que hacer frente a sus peores consecuencias».