Jon ORMAZABAL
PELOTA

El Bizkaia reparte la última txapela en la intimidad

Jokin Altuna parte como claro favorito en la final del Manomanista que lo enfrenta a Beñat Rezusta.

Confiando en que los pasos que como sociedad hemos dado en las últimas semanas no tengan vuelta atrás y que el de esta tarde vaya a ser el último partido profesional que se dispute sin los pelotazales, elemento indispensable en estos eventos, el Bizkaia de Bilbo reparte esta tarde la última de esta serie de cinco txapelas que se han disputado en la intimidad.

La falta de cintura y previsión empresarial nos priva esta vez de un elemento que siempre da calor y color a una final que esta vez viene marcada por la renuncia de Iñaki Artola. Al delantero de Alegia una lesión le ha privado de la que sería su primera final profesional.

En su lugar entra un zaguero, Beñat Rezusta, el primer guardaespaldas que acude al partido más importante del año desde que Abel Barriola lo hiciera en 2008, cuando cayó ante su paisano Oinatz Bengoetxea. Precisamente la lesión del delantero de Leitza fue la última y la primera vez en la larga historia de la modalidad en la que un sustituto, Mikel Urrutikoetxea en 2015, compareció en una final de la modalidad en sustitución de un compañero lesionado –Bengoetxea le ganó 22-7 en semifinales– y terminó calándose la txapela.

También tiene ciertas similitudes con la actual la última vez en la que un zaguero se hizo con el título más preciado, el Manomanista de 2003, cuando Patxi Ruiz se impuso en la final a un Aimar Olaizola que acudió al Atano III tras haber supuestamente superado, 42 días después, una lesión similar a la que ha apartado a Iñaki Artola este año, pero que se reprodujo nada mas comenzar.

Experiencia en finales

La de hoy será la primera final del Manomanista de Bergara, que acumula bastante experiencia en este tipo de partidos, eso sí, por parejas. Con dos títulos –2017 y 2019– y otras dos finales en su palmarés, no parece que la presión sea un obstáculo para un Beñat Rezusta que, ajeno al ruido surgido en torno a la participación, o no, de Iñaki Artola, se ha preparado a conciencia para este reto.

Y es que, el muro, aparentemente insalvable, al que tendrá que hacer frente será un Jokin Altuna que, aparentemente, llega en el mejor estado, de juego y mental, de su carrera. Con solo 25 años, son ocho, tres del Manomanista y cinco del acotado, las finales que acumula el delantero de Amezketa en los últimos cinco años, lo que más allá de los títulos hablan muy bien la fiabilidad que ha alcanzado el delantero guipuzcoano.

Por condiciones, estado de forma y bagaje, Jokin Altuna parte como claro favorito en todos los pronósticos, por mucho que en el único precedente entre ambos pelotaris en la distancia, en cuartos de final del Manomanista de 2017, el de Bergara se impusiera por 22-14.

Sin embargo, la evolución de Altuna III en la distancia ha sido sideral y aspira a una segunda txapela para alcanzar a Galarza III, García Ariño I, Atano X, Lajos, Arretxe, Arriaran II, Ogueta, Irribarria y Bengoetxea III y VI, y con solo 25 años.