Koldo LANDALUZE
CRÍTICA «Gunpowder Milkshake (Cóctel explosivo)»

Ellas disparan dos veces

Navot Papushado y Ehud Lavski han vuelto a sumar sus esfuerzos tras prender la mecha con su brutal “Big Bad Wolves” y ser bendecidos por el mismísimo Quentin Tarantino. Si bien ambos son los firmantes del guion, quien se ha colocado en esta oportunidad detrás de la cámara ha sido Papushado, el cual ha imprimido un ritmo trepidante a un thriller que en su engranaje argumental no ofrece excesivas novedades.

De claro toque comiquero, “Gunpowder Milkshake” es un estilizado y violento thriller de estilo pop en el que el personaje encarnado por Lina Headey –amada y odiada Cersei Lannister en “Juego de tronos”– se mete en la curtida piel de una sicaria que ofrece sus servicios a una organización criminal conocida como “La Firma”. Como resultado de una misión fallida, se vio en la necesidad de huir y dejar tras de sí a a su hija pequeña. Pasado el tiempo, esta también ingresa en la mencionada organización. Una nueva misión pondrá en jaque a madre e hija dentro de un batiburrillo circular en el que las situaciones parecen condenadas a repetirse.

Siguiendo la estela de propuestas como “John Wick”, pero otorgando plenos poderes a las mujeres, la película goza de un más que correcto acabado visual, aderezado con un estilo pulp que permite ciertas licencias con el humor negro. A ello se suman una serie de situaciones y personajes estrafalarios.

Básicamente, se trata de un explosivo divertimento que reniega en todo momento de la pompa y circunstancia y apuesta por un circense espectáculo de balas y golpes bien coreografiados.

A ello se suma un interersante reparto que, además de la excelente química maternofilial que comparten los personajes de Headey y Karen Gillan, incluye las presencias de Angela Basset, Carla Gugino, Michelle Yeoh, Chloe Coleman y un Paul Giamatti que cumple con creces su cometido de villano.