Después de lograr varios avances sobre el terreno en combates con los grupos yihadistas con los que se han enfrentado en el marco del conflicto sirio, formaciones kurdas anunciaron el establecimiento de una administración autónoma de transición. «Hoy es un día importante en la historia del pueblo kurdo», declaró Shirzad Izidi, portavoz del Consejo del Pueblo de Kurdistán Occidental, que anunció «el comienzo de la aplicación de una administración interina en Kurdistán Occidental».

Esta misma semana, el portavoz de las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG), Ridor Jalil, aseguró que un total de 23 localidades del norte de Siria estaban en sus manos tras arrebatar su control a organizaciones islamistas que combaten a su vez contra el Ejército sirio.

Tres regiones

La localidad de Qamishli fue el escenario de dos días de reuniones de varias comunidades, como cristianos, árabes y kurdos, según el comunicado del PYD. En esos encuentros se decidió la formación de un Consejo General, con 82 miembros, y la división del Kurdistán Occidental en tres regiones, Al Yazira, Kubani y Afrin, dotada cada una de su respectiva asamblea local, así como de representantes de un órgano ejecutivo regional, compuesto por trece personas. Esta administración se encargará de preparar elecciones locales y generales, así como de cuestiones políticas, militares, económicas y de seguridad.

Pero la iniciativa no cuenta con el aval de varios grupos kurdos en la zona. De momento, está compuesta por el Partido de Unión Democrática (PYD), uno de los principales grupos, y de varias formaciones menores. Pero el Consejo Nacional Kurdo (KNC) no se ha integrado en la misma. «Creo que este planteamiento tan precipitado, unilateral, será percibido como un obstáculo por la oposición siria. Creo que el PYD avanza en la mala dirección anunciando individualmente la administración local», explicó un miembro del KNC a France Presse.

Por otro lado, el Ejército sirio continuó su avance sobre las posiciones rebeldes en Alepo tras arrebatar a los sublevados varios distritos, lo que llevó a que las brigadas islamistas, incluidas las vinculadas a Al Qaeda, declararan un estado de emergencia y llamaran a todos sus combatientes a incorporarse a los frentes de la ciudad.