La tormenta Xaver, que está barriendo el norte y el este de Europa desde el jueves, ha causado ya la muerte de al menos diez personas, según informó AFP, aunque los pronósticos más pesimistas no se han cumplido.

Unas 400.000 viviendas carecían de electricidad en el norte de Polonia, y otras 50.000 en Suecia. Sin embargo, los daños materiales, aunque importantes, siguen siendo muy inferiores a las previsiones más negativas anunciadas por las autoridades antes de la tormenta. El temporal ha provocado un gran caos en el transporte marítimo, aéreo y ferroviario, sobre todo el Alemania.

En Hamburgo, golpeada por la tormenta la noche del jueves, el mercado de pescado y gran parte de los barrios del puerto quedaron inundados. La crecida de la marea batió el récord de 6,09 metros, pero no sometió a demasiada presión a los diques construidos durante los últimos años.

En Bélgica, diques y sacos de arena resistieron la crecida más importante en décadas, que alcanzó los 6,33 metros. En Holanda, Rotterdam y Dordrecht sufrieron inundaciones.

La tormenta comenzó a amainar ayer, a pesar del anuncio de intensas precipitaciones.