EHNE ha convocado una manifestación para mañana en Iruñea (12.00, antigua Estación de Autobuses) para exigir la paralización de la ampliación del Canal de Navarra y denunciar que los fondos utilizados en esta macroinfraestructura suponen una importante merma en los fondos destinados al Departamento de Agricultura. El sindicato agrario ya realizó esta advertencia en la reunión que el Consejo Económico y Social de Nafarroa realizó el pasado 12 de noviembre.

«Esta orientación del gasto está afectando a los agricultores y ganaderos, pero también a los derechos básicos de la ciudadanía que vive en el medio rural y que también padece los recortes en distintas áreas como sanidad, educación o en políticas sociales», añadió EHNE.

Como consecuencia del acuerdo suscrito con el Gobierno español en agosto en Artaxoa para acometer la ampliación de la segunda fase del Canal de Navarra, el Gobierno navarro se comprometió a aportar importantes cantidades de dinero. En 2014 serán más de 25 millones de euros. Mientras, se reducen las partidas destinadas a la agricultura y a la ganadería.

EHNE destaca que el Canal de Navarra, destinado a trasladar el agua de Itoitz a regadíos de la Zona Media y Erribera, es «un proyecto ruinoso y que ha fracasado». «No ha cumplido ninguna de la expectativas creadas: ni ha supuesto un incremento en las instalaciones de jóvenes en el sector, ni se ha instalado agroindustria, ni el mapa de cultivos se asemeja a lo que decían que iba a ser. Por el contrario, un 40% de la nueva superficie regable no hace uso del agua, además de que un 17% ni siquiera se ha procedido a hacer la instalación de la infraestructura de riego en la parcela. Todos estos logros nos van a suponer hipotecar por 30 años los presupuestos para hacer frente a las obligaciones que conlleva un sistema de financiación tan poco claro como es el del peaje en la sombra», explicó EHNE.

El sindicato agrario añadió que el Canal de Navarra va a fagocitar todo lo que no esté en el eje de este proyecto. «Es una estrategia suicida la que adopta el Gobierno de Navarra y demás afines e impulsores del proyecto», destacó EHNE, al tiempo que recordó que el modelo agrario predominante en Nafarroa es la explotación familiar frente al modelo industrial que impulsan macroproyectos como el Canal de Navarra y que «no necesitan de los agricultores y de los ganaderos».

«Vemos como esta equivocada apuesta supone el desmantelamiento de partidas claves para conseguir objetivos estratégicos: desaparición de las ayudas a la ganadería sostenible, a las cumas, las ayudas a producción ecológica y estepas, recortes en las ayudas a modernización de explotaciones, en las ayudas a asociaciones ganaderas, consejos reguladores,...», añadió el sindicato agroganadero, que comparó el Canal de Navarra con otras obras ruinosas como el Tren de Alta Velocidad, el circuito de Los Arcos, la Ciudad Agroalimentaria de Tutera o el pabellón Navarra Arena.