Un nuevo informe pericial realizado por técnicos del Instituto de Patrimonio Cultural español y filtrado ayer a varios diarios del grupo Vocento concluye que varias de las piezas de Iruña-Veleia analizadas «tienen un origen reciente». «Las 35 piezas -de las 39 inscripciones analizadas- presentan suficientes anomalías como para que los grafitos que contienen sean considerados contemporáneos. Dentro de este grupo están incluidos la totalidad de los que por su temática han sido considerados excepcionales», detalla el informe, elaborado a petición del juez que lleva el caso, ya que los arqueólogos Eliseo Gil y sus colaboradores fueron denunciados por la Diputación alavesa por atentado contra el patrimonio.

El informe señala que en las piezas se han hallado restos de acero inoxidable y nubes de oro.

Lurmen (Eliseo Gil e Idoia Filloy), SOS Iruña-Veleia, Euskararen Jatorria y el bioquímico Koenraad van den Driescche han convocado para hoy una rueda de prensa en Gasteiz. «Hace días que tenemos acceso a dicho informe y después de haberlo estudiado a fondo, podemos afirmar que nos encontramos ante un verdadero atentado contra el sentido común y la arqueometría», señalaron ayer.

«Los grafitos han carecido de cadena de custodia durante estos seis últimos años, con todo lo que ello puede conllevar. Por otra parte, las pruebas que aduce el laboratorio para intentar demostrar las modernidad de los mismos son, a nuestro entender, antipruebas más que otra cosa», añadieron.