Beñat ZALDUA

1.452 entidades se comprometen con la consulta en el Pacto por el Derecho a Decidir

Aunque a un ritmo lento, el Pacto Nacional por el Derecho a Decidir (PNDD) de Catalunya sigue caminando con éxito. La instancia constituida el pasado 26 de junio como punto de encuentro entre la clase política, los actores económicos y la sociedad civil a favor del derecho a decidir, celebró ayer en el Parlament su segunda reunión, en la que perfilaron sus actuaciones de cara a los intensos meses que se esperan en Catalunya, con la vista puesta especialmente en la consulta prevista para el 9 de noviembre.

La reunión también sirvió para dar cuenta de las nuevas adhesiones al Pacto, que ya han alcanzado a un total de 1.452 entidades de todo signo político y actividad política, económica o social.

Con el president, Artur Mas, y el expresident del Parlament y encargado de dinamizar el PNDD, Joan Rigol, a la cabeza, representantes de algunas de las entidades firmantes del Pacto se reunieron durante más de dos horas para consensuar un nuevo acuerdo de mínimos, según el cual los participantes se comprometen a centrarse en el derecho a decidir «como expresión de la voluntad ampliamente mayoritaria de nuestro pueblo y como reto a conseguir, obviando cualquier debate sobre el sentido del voto», según publicó la prensa catalana.

Caras nuevas

Es decir, el PNDD se limitará a defender a capa y espada el derecho a decidir y la consulta, sin mojarse, como es comprensible, sobre la independencia. La reunión de ayer sirvió también para ver algunas de las caras nuevas recientemente incorporadas al PNDD, entre las que destacó el exdiputado y todavía militante del PSC Toni Comín, en representación de la asociación Socialisme, Catalunya i Llibertat.

Otro dirigente político de la misma órbita presente desde la constitución del Pacto es el exconseller Ernest Maragall. Pero sin sorpresa alguna, el PSC no acudió a la cita.

Tampoco lo hizo la principal patronal catalana, Foment del Treball, en el centro de una forzada y artificial polémica en los últimos días -el presidente, Artur Mas, pidió al mundo empresarial una mayor implicación, que Foment rechazó esta semana-.

Sin embargo, la representación del mundo económico en la reunión no fue ni mucho menos menor, ya que a ella asistieron otras patronales de medianas y pequeñas empresas como PIMEC y CECOT, así como representantes de las cámaras de comercio catalanas.

También acudieron al encuentro la mayoría de sindicatos, incluidos UGT y CCOO, cuyo secretario general, Ignacio Fernández Toxo, aseguró el martes respetar que la sección catalana de su sindicato apoye el derecho a decidir.