Alberto CASTRO
Al cierre

Ucrania existe

Las bolsas se percataban ayer de que Ucrania existe y de que los movimientos de las tropas rusas pueden elevar el tono del conflicto militar. Este era, al menos, el argumento utilizado por los expertos para justificar el enfriamiento sufrido por la tarde. La euforia de la mañana, sustentada en las buenas cuentas, entre otras compañías, de Facebook y Apple, y en el aumento inesperado de la confianza empresarial en Alemania, de acuerdo al instituto IFO, daba paso a un brusco repliegue en los mercados europeos. Pero a media hora del final de las negociaciones se impusieron las compras hasta girar los índices. De otro lado, en Estados Unidos se publicaron datos de pedidos de bienes duraderos en marzo, mejor de lo esperado, y de peticiones semanales de subsidio de desempleo, más de las previstas. El Ibex acabó en los 10.462 puntos, después de avanzar un 0,36%. París (+0,64%), Londres (+0,42%) y Fráncfort (+0,05%) también superaron el temor a la crisis ucraniana. En el Ibex, los bancos Sabadell (+2,78%) y Caixabank (-1,76%) presentaron sus resultados del primer trimestre. El primero, el mejor del selectivo, ganó 82,1 millones de euros, un 58,8% más, mientras que el segundo obtenía un beneficio de 152 millones de euros, un 54,6% menos. El más castigado del día fue Gamesa (-2,12%). Entre los valores de mayor capitalización destacó el avance de BBVA (+1,16%). En París, se disparó Alstom (+10,93%), catapultada por una presunta OPA de General Electric sobre una gran parte de su actividad. Los títulos de Michelin (-4,23%) se vieron arrastrados por la caída de facturación.