Alberto CASTRO
Al cierre

Los 10.500 puntos siguen lejos

El Ibex logró reponerse de la caída del lunes, pero no tuvo suficiente impulso para poder atacar los 10.500 puntos. La escasa consistencia de la subida lograda ayer se debía, en parte, a la inquietud que ronda de nuevo el mercado de deuda, ya que la prima de riesgo se iba por encima de los 175 puntos y la rentabilidad del bono a diez años superaba el 3%. El éxito de la subasta del Tesoro, en la que se colocaron más de 3.500 millones de euros en letras a 3 y 9 meses, no servía para enfriar el ambiente. Además, la falta de apoyo del resto de bolsas europeas se extendía a Wall Street, que abría en clave negativa. Hoy los mercados esperarán al contenido de las actas de la Reserva Federal con el fin de buscar indicios sobre el siguiente paso de Janet Yellen en política monetaria. El Ibex acabó con un avance del 0,27%, hasta los 10.453,80 puntos. Fráncfort (-0,21%), París (-0,39%) y Londres (-0,62%) culminaron la sesión a la baja. En el Ibex se vivió una respuesta del sector bancario al castigo de la jornada anterior, cuando se supo que Deustsche Bank hará una ampliación de capital de 8.000 millones. Ayer, Bankinter (+3,82%) lideró las ganancias. Por detrás acabaron las revalorizaciones de Bankia (+2,50%) y Santander (+1,27%), mientras que el resto de los bancos recuperó menos de un 1%. Gamesa (+3,64%) y Mediaset (+2,77%) también se auparon a la parte alta de la tabla. Entre los perdedores, despuntaron los recortes de OHL (-3,12%) e Inditex (-1,71%). En París, Cap Gemini (-2,92%) y Renault (-2,60%) fueron los mejores, frente a Danone (-1,65%), el más castigado del día.