Ramón SOLA
GIPUZKOA | ELECCIONES EUROPEAS

EH Bildu amplía el colchón y enfría las expectativas jelkides para el próximo envite

La pugna que mantienen EH Bildu y PNV en Gipuzkoa se asemeja a la de dos ciclistas que hacen «la goma». Los jelkides saludaron el resultado de las autonómicas de finales de 2012 como un anticipo de que la hegemonía del soberanismo de izquierdas en el herrialde tenía los meses contados, dado que en Gipuzkoa se situaron a apenas 500 votos (113.978 por 114.460 de Bilbo) y a quince centésimas en porcentaje. Sin embargo, estas elecciones no han provocado el vuelco, sino justo lo contrario: EH Bildu se ha distanciado de nuevo y llegará a la cita foral y municipal del próximo año con un colchón que parece sustancioso.

El porcentaje de voto de EH Bildu en estas europeas en Gipuzkoa asciende al 31,24%, tres puntos menor que el que llevó a Martin Garitano a Diputación, pero el del PNV no crece más de un punto desde entonces, del 23% al 24%, con lo que la distancia general entre ambos ha pasado de once puntos a siete puntos en tres años. Sigue siendo importante, pero más aún cuando la brecha se ha vuelto a reabrir en el tercer año de la legislatura después de quedar anulada casi completamente en las autonómicas.

Por localidades, la coalición que el domingo representaba Josu Juaristi manda en más de tres cuartas partes de los municipios guipuzcoanos, con una representación muy homogénea, mientras el PNV mantiene algunos feudos clásicos como Azkoitia o Elgoibar, pero pierde otros como Urnieta, que se suman a los que anteriormente ya pasaron a la izquierda. En Zarautz se ha impuesto a EH Bildu por 150 votos.

La gran batalla de 2015, con todo, se librará en Donostia. Y EH Bildu ha confirmado ahí que la victoria de Juan Karlos Izagirre en 2011 no fue casual. Amplía su distancia sobre el PSE a 4.500 votos y a más de 5.000 respecto al PP, sin que el habitual tirón estatal de estos comicios europeos se haya notado lo más mínimo.

Solo el PNV resiste a rueda en la capital: Eneko Goia, portavoz municipal, presenta este resultado como la confirmación de «una base muy sólida y consolidada» en la ciudad, pero seguramente esperaba más. De hecho, en estas mismas declaraciones Goia apostilló que «EH Bildu sabe aguantar y mantiene bien el tipo».