Integrantes de la iniciativa “Parkea Bizirik Kukulunbera” han protestado porque aseguran que una empresa contratada por Renfe, con el visto bueno del Gobierno municipal del Ayuntamiento de Donostia, va a proceder «en las próximas horas, probablemente en horario nocturno, durante la franja horaria del confinamiento para que la gente no se entere», a la tala del roble centenario.

Según este colectivo, en 2018 una empresa subcontratada por Renfe presentó en el Ayuntamiento un proyecto para la modernización de la estación de Herrera. El proyecto también recoge la construcción de dos ascensores, una nueva rampa de acceso y unas nuevas escaleras. El equipo redactor proyectó talar el roble y construir en su lugar las escaleras de acceso.

En opinión de los vecinos, la propuesta, que fue aceptada por el Gobierno municipal, «también recogía un acuerdo “no escrito” para ocultar a la ciudadanía la agresión medioambiental».

En este sentido, exigen al alcalde, Eneko Goia, que «en declaración pública y urgente, se comprometa a no talar el roble de la estación de Herrera y que las nuevas escaleras proyectadas se reubiquen en otro lugar».

Asimismo, piden al primer edil que «sea consecuente con la declaración de Emergencia Climática aprobada por la Junta de Gobierno local en la primavera de 2020».

La iniciativa también insta al resto de vecinos de Herrera a que «exprese su apoyo al roble mediante carteles en establecimientos y balcones y que solicite a los mandatarios que reconsideren y corrijan esta acción que sólo genera tristeza y desafección».