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Cespa asumirá la limpieza de Gasteiz, poniendo fin a la polémica etapa de FCC

El Órgano de Recursos Contractuales ha rechazado los recursos de FCC y ha dejado en manos de la UTE formada por Cespa-Onaindia el servicio de limpieza de Gasteiz. Se pone fin así a un litigio que comenzó en 2017, con una resolución de la Comisión Jurídica Asesora de la CAV favorable al Ayuntamiento.

Contenedores en Gasteiz. (Jaizki FONTANEDA/FOKU)
Contenedores en Gasteiz. (Jaizki FONTANEDA/FOKU)

La UTE conformada por Cespa-Onaindia asumirá el servicio de limpieza pública urbana, recogida y transporte de basuras de Gasteiz después de que el Órgano de Recursos Contractuales de la CAV (OARC) haya rechazado las alegaciones presentadas por FCC, la actual adjudicataria.

El contrato del servicio de limpieza viaria es el más cuantioso del Ayuntamiento –ronda los 100 millones en cuatro años– y su renovación se ha prolongado en el tiempo tras varios concursos fallidos.

En abril la Junta de Gobierno Local adjudicó el servicio a Ferrovial, a través de su filial Cespa-Onaindia, tras considerar su oferta la más ventajosa, tanto por la calidad del servicio como desde el punto de vista económico.

Sin embargo, la firma del contrato se pospuso después de que FCC presentara un recurso ante el OARC, que ha desestimado todas sus alegaciones, según ha dado a conocer este viernes el alcalde, Gorka Urtaran.

Una vez conocida la resolución del OARC, el Ayuntamiento formalizará el contrato de limpieza con Cespa-Onaindia. En los próximos meses se realizará la liquidación del anterior contrato y se iniciará la ejecución del nuevo, que supondrá la renovación de los contenedores y la incorporación de nueva maquinaria a la flota.

Cuatro años de conflicto con FCC

Cabe recordar que los problemas con FCC comenzaron hace años, y fueron a más a partir de 2017, cuando la empresa y el Ayuntamiento dejaron en manos de la Comisión Jurídica Asesora de la CAV (COJUA) la resolución de sus diferencias en torno a quién debía asumir las modificaciones de las antigüedades medias, las primas de jubilación anticipada y los días de absentismo.

La COJUA dio la razón al Consistorio y la UTE formada por FCC y GMSM anunció meses después su intención de poner fin al contrato, que quedó rescindido en diciembre de 2018. El Gobierno local dijo entonces que el servicio se adjudicaría durante el 2019, pero finalmente el proceso se ha prolongado más de dos años.