Al igual que el viernes por la tarde, los encierros y las protestas se han vuelto a repetir esta mañana en varias localidades vascas y frente a los hospitales públicos.

Cientos de personas se han concentrado en la plaza situada frente al Hospital de Gurutzeta tras una pancarta en la que aseguraban que «el aborto no es un delito; es un derecho». Después de denunciar la actuación policial de la Ertziantza del día anterior, han reclamado que la red pública de hospitales de Osakidetza realice este tipo de intervenciones «cuando las mujeres lo deseen».

Asimismo, han pedido a las instituciones «insumisión a esa ley» y que garanticen el derecho de las mujeres que pretende cercenar la nueva normativa elaborada por el Ministerio de Justicia.

En Donostia, decenas de personas ha acampado esta noche en las inmediaciones del Hospital Donostia en otro acto de protesta contra la aprobación de la Ley del Aborto por parte del Gobierno del PP.

Según ha explicado una portavoz del colectivo a la agencia EFE, la intención de la convocatoria era pasar la noche dentro del centro hospitalario donostiarra, pero sobre las 20.00 horas del viernes agentes de la Ertzaintza situados a la entrada del edificio les comunicaron que «no podían pasar al interior».

Ante esta situación, decidieron acampar en un prado aledaño al hospital, donde han pasado la noche hasta que esta mañana han ofrecido una rueda de prensa en la que han valorado las acciones que se han llevado a cabo en otras localidades.

Han considerado que la nueva norma constituye «un paso atrás» respecto a la anterior legislación sobre la interrupción voluntaria del embarazo y han subrayado que el «Estado no puede decidir y controlar el cuerpo de las mujeres» al tiempo que han defendido el aborto «libre, gratuito y seguro».

En Gasteiz, alrededor de una centenar de manifestantes han marchado desde el Hospital de Santiago por el centro de la ciudad con banderas moradas y una pancarta que reclama el derecho a abortar.

Durante el recorrido, las asistentes han denunciado la intervención de la doctrina de la Iglesia en la política social del Gobierno de Mariano Rajoy con lemas como «la iglesia y la derecha nos tienen hasta las tetas».

Asimismo, unas 60 personas han realizado un encierro esta noche en Ermua en contra de la Ley del Aborto.