La eliminatoria es a doble partido y el vencedor de la misma se clasificará para las semifinales, que se jugarán por sistema de concentración o «final a cuatro» el fin de semana del 3 y 4 de mayo.

El conjunto navarro visita la pista zaragozana con el único objetivo de estar en la «Final four» de esta competición, según ha informado el club navarro.

Esta meta se ha convertido en uno de los «grandes alicientes» de esta segunda vuelta y el conjunto iruindarra está «mentalizado» para afrontar este choque en las «mejores» condiciones.

Anaitasuna ha llegado a esta ronda tras derrotar al Cangas (22-28) en octavos de final, en su «inexpugnable» pista de O Gatañal y en un choque donde «arrancó» la gran racha de resultados del Helvetia que se vio «truncada» el pasado viernes en Gijón, al perder (26-22) por primera vez después de cinco encuentros oficiales.

Helvetia ha visitado la pista aragonesa en la liga Asobal, donde sumó los dos puntos al imponerse por la mínima diferencia (22-23), en la segunda jornada de la segunda vuelta. El precedente es «bueno» para los navarros, pero los técnicos siempre «insisten» en que son competiciones «muy diferentes». Se trata de un partido de ciento veinte minutos, donde los sesenta «definitivos» se jugarán la semana siguiente en Iruñea.

El técnico del Anaitasuna, Aitor Etxaburu, confía en recuperar para este encuentro al croata Bozidar Nadoveza, que no pudo desplazarse al último partido jugado en Gijón por un problema familiar.

El balonmano Aragón, a pesar de los «problemas económicos» que atraviesa, llega en un buen momento, tras vencer en la liga a Bidasoa y Cangas, por lo que se presume un duelo «muy equilibrado» y con una motivación «extraordinaria» por parte de los dos equipos.

El partido se jugará mañana a las 20:45 en Zaragoza y será dirigido por los árbitros García Serradilla y Marín Lorente. Los otros enfrentamientos de cuartos de final son FC Barcelona B-Huesca, Granollers-Juanfersa y Puerto Sagunto-FC. Barcelona.