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El Parlamento navarro rechaza instar al Gobierno a firmar el convenio del TAV

El Parlamento navarro ha rechazado una moción en la que se instaba al Gobierno de Nafarroa a firmar un Convenio con el Estado para acometer las obras del TAV, por entender que facilitaría la ejecución y la participación directa en una obra «vital» para la proyección exterior, empleo y competitividad.

La moción sobre el TAV ha sido rechazada por el Parlamento. (Idoia ZABALETA/ARGAZKI PRESS)
La moción sobre el TAV ha sido rechazada por el Parlamento. (Idoia ZABALETA/ARGAZKI PRESS)

Frente al apoyo de UPN, PPN y PSN, las formaciones Geroa Bai, EH Bildu, Podemos-Ahal Dugu e I-E han votado en el Pleno en contra de la resolución regionalista cuyo defensor, Carlos García Adanero, ha rechazado una enmienda de Geroa Bai y ha aceptado una del PPN.

La resolución instaba al Gobierno de Nafarroa a «firmar un convenio con el Ministerio de Fomento y ADIF» al objeto de «llevar a cabo las obras necesarias para el corredor ferroviario Mediterráneo-Cantábrico a su paso por Navarra con estándares internacionales, doble vía, ancho internacional y uso para pasajeros y mercancías».

En este punto, el PPN había añadido vía enmienda el compromiso «de que las obras estén finalizadas para el año 2023». La propuesta también emplazaba al Ejecutivo navarro a establecer en dicho Convenio «los tramos Zaragoza-Castejón, Castejón-Esquíroz, Esquíroz-Zuasti y Zuasti-Y vasca».

En un tercer apartado, se exhortaba al Gobierno a «llevar a cabo actuaciones necesarias para mejorar el sistema ferroviario de proximidad/cercanías en Navarra, utilizando bien la vía convencional o las nuevas infraestructuras», promoviendo «el uso del ferrocarril como medio de transporte de media distancia intrarregional».

La enmienda de Geroa Bai reflejaba el «compromiso con el desarrollo de un corredor ferroviario Atlántico-Mediterráneo que incluya a la Comunidad Foral y la conecte con Europa a través de una solución ferroviaria compatible con los estándares internacionales y capacidad suficiente».
La formación pedía que se respondiera «adecuadamente a las necesidades de transporte de mercancías y personas, con un sistema de financiación no gravoso».

En un segundo punto, se emplazaba al Ejecutivo a «superar los planteamientos hasta ahora realizados por el Estado a través de sucesivos convenios, por resultar claramente insuficientes».

Además, se rechazaba «la utilización política que UPN, PP y PSN están realizando permanentemente con respecto a esta infraestructura». «Después de 20 años con responsabilidad al frente de los gobiernos estatal y navarro, su gestión se salda en cero kilómetros construidos y una deuda del Estado para con la Hacienda Navarra de 45 millones de euros», contemplaba la enmienda.

Por UPN, Carlos García Adanero ha matizado que la propuesta no había sido formulada para dividir al cuatripartito, pues «no hace falta presentar una moción» para ello. Además, ha indicado que el TAV no romperá el Gobierno porque «el pegamento de echar a UPN va por encima» de cualquier desarrollo del herrialde.

Por el PP, Ana Beltrán ha pedido que no se ceda ante «chantajes» o «amenazas» y que se demuestre «que en este gobierno no manda Bildu».

El portavoz de Geroa Bai, Koldo Martínez, ha calificado la moción como «envenenada», «innecesaria y cargada de intencionalidad política», por no haber sido presentada para ser aprobada sino «para ver si consiguen horadar la cohesión» de los cuatro grupos.

«Sabemos de sus tretas y sus artimañas», ha advertido Martínez, que ha lamentado que «no les importa la moción, ni el tren, ni mucho menos que las obras estén finalizadas para 2023». «Su único objetivo es romper el cuatripartito y esta vez tampoco lo van a conseguir», ha asegurado.

Por el PSN, Inma Jurío ha recordado que en este momento hay una mayoría parlamentaria que apuesta por un convenio con el Estado. «No queremos que se rompa el cuatripartito -ha matizado-, pero que sean conscientes de que el desarrollo económico de nuestra comunidad pasa por el acuerdo de mayorías».

El portavoz de EH Bildu, Adolfo Araiz, ha rechazado la moción por no estar de acuerdo con el modelo de tren que plantea el Estado, y el parlamentario de Podemos Rubén Velasco ha añadido que «antes de hablar de convenios hay que definir las necesidades».

En nombre de I-E, Marisa de Simón ha rechazado la propuesta porque «se insiste en firmar un convenio cuyo modelo de tren» no es compartido por la formación.