En una gran actuación colectiva, los de Pedro Martínez han amargado la que pudo ser la victoria número 52 del Joan Plaza al frente del Unicaja en la Euroliga, con la que hubiera igualado al italiano Sergio Scariolo. Con un mejor arranque, el equipo malagueño se ha puesto rápidamente por encima en el marcador y, gracias a su entramado defensivo, inteso y duro, ha maniatado al conjunto gasteiztarra, inoperante en ataque y que ha estado tres minutos sin anotar (11-4, minuto 5).

Baskonia, fatigado al no saber atajar la defensa del rival, intentaba jugar dentro de la zona, pero el Unicaja reboteaba y corría al contraataque sin oposición (18-11, minuto 8). Dos triples finales del alero italiano Patricio Garino y de un excajista, el base uruguayo Jayson Granger, han sentado las bases para una posible remontada (21-19, minuto 10).

El Unicaja, algo cansado por el esfuerzo titánico defensivo, había plegado sus armas y dejado espacio a Granger, con ganas de inmortalizarse en el Carpena, que ha completado un inmenso segundo cuarto y ha igualado a 21 puntos en el minuto 11, y a continuación con tres triples ha mostrado sus cualidades (25-32, minuto 15).

El conjunto gasteiztarra había logrado desarbolar al Unicaja desde la línea de 6,75, aunque seguía trabajando para no desaparecer, pero el acierto exterior del rival -siete triples por uno de los cajistas- decantaron el partido al descanso (43-46).

El conjunto gasteiztarra estaba intratable con los triples, destacando el alero esloveno Janis Timma y el pívot estadounidense Kevin Jones, con dos cada uno, en un tercer periodo que ha vuelto a decantar el cuarto a su favor por el escaso acierto del Unicaja en tiro exterior. El escolta serbio Nemanja Nedovic y el pívot georgiano Giorgio Shermadini camuflaban con su calidad los guarismos negativos desde la línea de triples (64-67, minuto 30).

El partido ha sido muy vistoso en el último cuarto, con un Baskonia que dominaba, pero no lograba romper el encuentro, siguiendo con su excelente porcentaje de triples (75-79, minuto 38). El Unicaja jugaba por dentro con Shermadini y no dejaba escapar al conjunto alavés, incluso con los errores del alero polaco Adam Waczynski y el ala-pívot estadounidense Jeff Brooks.

Shengelia continuaba con su periplo brillante en la canasta contraria, y el base Alberto Díaz, listo y audaz ha robado un balón que ha igualado el encuentro a 83 a falta de cinco segundos. La prórroga se acercaba, pero el Unicaja no ha sabido defender el último balón, que lo ha ejecutado Timma con una bandeja a pase de Shengelia, para sumar el 83-85 final que le permite separarse en la clasificación con un triunfo más que los andaluces.