LAB está empeñada en la lucha por el empleo digno y en contra de la precariedad, por lo que va a profundizar en la acción sindical incrementando la conflictividad en los centros de trabajo para mejorar las condiciones de las y los trabajadores. Sus principales reivindicaciones, así lo ha señalado su secretaria general, son que se establezca un salario mínimo de 1.200 euros, luchar contra la brecha salarial que castiga a las mujeres y avanzar hacia un marco vasco de negociación colectiva.

Otro eje primordial del sindicato que lidera Garbiñe Aranburu va a ser el de combatir la alta siniestralidad. «La muerte por accidente de trabajo es una forma de violencia patronal hacia las y los trabajadores», ha subrayado Aranburu, quien ha anunciado que ha trasladado a quienes conforman la mayoría sindical una reflexión para avanzar en la respuesta a esta problemática.

LAB considera que el aumento de la conflictividad en las empresas y el aumento de la movilización evidencia que «hay una mayoría social en este país que apuesta por otro modelo económico, por la transformación social». Para garantizar ese cambio, demanda que se modifique la orientación de las políticas públicas. «Hay muchas medidas que se pueden adoptar dentro del actual marco competencial», ha asegurado Aranburu.

Para ampliar el marco competencial, LAB cree prioritario un cambio político. Tal y como lo dijeron cuando se hizo público el acuerdo entre PNV y EH Bildu sobre el nuevo estatus, ha apostado por salir del ámbito institucional y socializar la reivindicación mayoritaria del derecho a decidir, de modo que se puede construir un marco vasco de relaciones laborales.

La comparecencia de hoy, un año después de la declaración conjunta con ELA para impulsar un proceso soberanista desde la izquierda, ha servido para que LAB insista en que la responsabilidad del mismo es de ambos sindicatos. Aranburu ha dicho que tienen la suficiente fuerza para promoverlo sin necesidad de contar con nadie más, lamentando que ELA haya renunciado a ello. H apuntado a que espera de que tras las elecciones sindicales la central que lidera Txiki Muñoz retorne a esa vía de colaboración conjunta,